Alonso Moleiro (ALN).- Cuestionado en algunos sectores a causa de su estilo moderado y pactista, Henri Falcón es el principal candidato opositor que se ha lanzado a las elecciones organizadas por el aparato institucional de Nicolás Maduro en Venezuela, a celebrarse este 20 de mayo. Falcón recorre el país para invitar a la población a remontar la cuesta del chavismo. En términos numéricos, las posibilidades de victoria guardan relación directa con la decisión de ir a votar. Sobre este dilema discurre hoy la atormentada realidad de los venezolanos.
Henri Falcón es el principal candidato opositor que ha decidido presentarse a los comicios presidenciales organizados por el régimen bolivariano de Nicolás Maduro en Venezuela, convocados para este 20 de mayo. Una consulta electoral que ha sido cuestionada por casi todo el mundo civilizado, por considerarla amañada, y que se desarrolla mientras un número importante de los actores de la oposición democrática venezolana cursa penas de prisión, procesos judiciales, el exilio o la inhabilitación política.
Así las cosas, en un marco tan adulterado y discutido, Falcón, a la cabeza de su partido Avanzada Progresista (que forma parte de la Mesa de la Unidad Democrática, MUD), junto a otras formaciones como Copei y el MAS, ha tenido que emplear tiempo y energía en justificar su presencia en la contienda, y en convencer al electorado de las posibilidades objetivas de una victoria. Una victoria que, en una circunstancia política medianamente decente, cualquier candidato opositor a Maduro obtendría sin inconvenientes.
Falcón afirma que no desconoce las asimetrías de la legalidad chavista, pero asegura que nada puede interponerse a un caudal masivo de votos
Mientras la Mesa de la Unidad Democrática, la coalición de partidos opositores a Maduro, se mantiene firme en la decisión de no acudir a los comicios, Falcón, exgobernador del estado Lara, un moderado al que no le gusta abusar de los adjetivos, promete el reencuentro y la reconciliación, e insiste en animar a la población a cruzar a nado el río crecido de estas elecciones, a sabiendas del deseo de cambio político que subyace en la inmensa mayoría del país. Falcón afirma que no desconoce las asimetrías de la legalidad chavista, pero asegura que nada puede interponerse a un caudal masivo de votos. Muchas personas, apuradas ante la inminencia de la consulta, y a falta de mejores opciones, se están decidiendo a votar apenas en los últimos días.
En una campaña anticlimática, signada también por su insólita brevedad –poco más de 20 días mientras el país vive la peor crisis económica y social de su historia-, Falcón recorre todos los recovecos de la nación, intentando animar a la población a que no se entregue, a que lo intente de nuevo por la vía del voto. Esta labor ha podido cumplirse a medias. Dentro del crepitar interno de la MUD, algunos de los voceros comparten su postura y lo están acompañando “por los caminos verdes”. Así lo refleja la cuenta de Twitter de Falcón.
Ahí en la calle y en los cerros es donde está el trabajo del político de hoy, ahí están los problemas que debemos resolver. El más grande de los males está temblando, solo falta el empujón que le vamos a dar este #20M #ConTuVotoSeVa! pic.twitter.com/OcsKDkj6fn
— Henri Falcón (@HenriFalconLara) 2 de mayo de 2018
Extraordinario recorrido el de hoy por #Petare lleno de gente humilde esperanzada y comprometida con el cambio ¡Todos vamos a votar! #ConTuVotoSeVa pic.twitter.com/YVNDI6eGxj
— Henri Falcón (@HenriFalconLara) 2 de mayo de 2018
Las encuestas otorgan en este momento una pequeña ventaja a Falcón sobre Nicolás Maduro. En un contexto completamente desangelado para el desarrollo de una estrategia electoral, los analistas consideran que la intención de voto debe aumentar al menos 10% para que las expectativas de victoria de Falcón puedan tener un asidero.
Son muchas las personas que consideran todas estas disquisiciones esfuerzos inútiles: Maduro y sus funcionarios harán lo necesario para rebanar la voluntad popular usando los subterfugios de un Consejo Nacional Electoral (CNE) controlado a placer, como ya ocurrió en ocasión de la Asamblea Constituyente y la reciente elección de gobernadores.
Esto no impide a Falcón seguir soñando con llegar al Palacio de Miraflores, anunciando decisiones de gobierno.
Anunciamos frente medios nacionales e internacional, planteamientos para nuestro Gabinete de Gobierno: Canciller Eduardo Fernández;
Representante o Embajador en la ONU, Pedro Nikken; Representante o Embajador en la OEA, Julio César Pineda. pic.twitter.com/uRiXv7s4Yr— Henri Falcón (@HenriFalconLara) 1 de mayo de 2018
Estos son los salarios dolarizados propuestos para nuestros militares. Cada #trabajador venezolano será recompensado con un pago justo, que permita cubrir sus necesidades, con el apoyo de medidas sociales complementarias y el funcionamiento de servicios públicos #01May pic.twitter.com/Zhe8vcQtUS
— Henri Falcón (@HenriFalconLara) 1 de mayo de 2018
En medio de las tormentas en torno a la pertinencia de la participación en estas elecciones, Henri Falcón ha colocado en la calle algunos elementos diferenciadores en la propuesta programática. Ha ofrecido su nombre para timonear una transición política; ha hablado de una enmienda constitucional para abolir la reelección presidencial, y ha propuesto un programa de reformas económicas asentadas en la libertad cambiaria y la dolarización de la economía.
El cambio en nuestro país estará fundamentado en la educación y la libertad de pensamiento; el ejercicio de los #Docentes será remunerado con un salario justo, dolarizado, para proteger su valor y garantizar el poder adquisitivo de los educadores -Tabulador- #DiaDelTrabajador pic.twitter.com/37LFwYLi1i
— Henri Falcón (@HenriFalconLara) 1 de mayo de 2018
El sector privado debe ser un pilar fundamental en la economía de la nueva Venezuela, estamos comprometidos a generar condiciones para que nuestro empresariado trabaje en la activación de diversos rubros y la creación de fuentes de empleo #30Abr @Conindustria pic.twitter.com/eI4yVnJGmh
— Henri Falcón (@HenriFalconLara) 30 de abril de 2018
El sueldo mínimo que proponemos inicialmente será de 75$ aumentando progresivamente hasta 300$. La estabilización económica es posible!
— Henri Falcón (@HenriFalconLara) 30 de abril de 2018
La oposición venezolana deberá entonces derrotar a Nicolás Maduro con un brazo amarrado y el árbitro obrando en contra. El diseño legal del régimen chavista ha colocado de nuevo a los adversarios dentro de una compleja trampajaula existencial, en la cual es imposible no tomar decisiones que terminen comportando enormes costos, con actores que pugnan en direcciones opuestas.
Maduro, cuyos niveles de rechazo tocan casi el 80% del electorado, cifra las esperanzas de victoria en esa realidad. Una parte de la oposición considera ofensivo el solo hecho de plantearse la asistencia a estas elecciones, aunque de momento no pueda ofrecer una alternativa política que no sea la espera y el aguante. Falcón, desprendido por cuenta propia, promete cumplir la encomienda y abrir las compuertas del regreso de la legalidad y las libertades públicas. La desesperación ciudadana, sin dudas, fortalece su opción en estos segundos históricos, que pueden convertirse, ciertamente, en la última oportunidad de los venezolanos.