Daniel Gómez (ALN).- Julio Borges, canciller de Juan Guaidó, denuncia que el venezolano Manuel Barroso, militar y expresidente de la Comisión Nacional de Administración de Divisas, asaltó la sede de la embajada de Venezuela en Brasil “con grupos violentos del Foro de Sao Paulo y agentes cubanos”. Una sede que en la mañana del miércoles fue entregada por los funcionarios de Maduro al equipo de Guaidó.
“Repudiamos la invasión de la embajada de Venezuela por gente extraña a la misma”, dijo este miércoles Jair Bolsonaro, presidente de Brasil, en su cuenta de Facebook. “Ya tomamos las medidas necesarias para preservar el orden, de conformidad con el convenio de Viena sobre relaciones diplomáticas”.
“La gente extraña” son seguidores de Nicolás Maduro que no se tomaron a bien que funcionarios chavistas, en la madrugada del miércoles, entregaran la embajada de Venezuela en Brasil a los delegados de Juan Guaidó. La denuncia la hizo en Twitter el canciller del presidente encargado, Julio Borges:
“El militar corrupto y expresidente de la Comisión Nacional de Administración de Divisas (Cadivi), Manuel Barroso, asaltó la sede con grupos violentos del Foro de Sao Paulo y agentes cubanos”. Y agregó: “La violencia con la que actúan evidencia su desesperación, no tienen apoyo de nadie”.
Por Twitter circulan vídeos donde se ve a estos grupos violentos tratar de entrar en la embajada de Brasil. Uno lo compartió el propio Julio Borges.
Diplomáticos venezolanos se pusieron del lado de la democracia y entregaron la sede de la embajada de 🇻🇪 en 🇧🇷 al gobierno legítimo.
Ante esto, el militar corrupto y expdte de CADIVI, Manuel Barroso, asaltó la sede con grupos violentos del Foro de Sao Paulo y agentes cubanos. pic.twitter.com/ifJfSSzCyu
— Julio Borges (@JulioBorges) November 13, 2019
La versión de María Teresa Belandria Expósito, embajadora de Guaidó en Brasilia, es que en la mañana del miércoles un grupo de funcionares de la embajada de Venezuela en Brasil se comunicó con ellos “para informarnos que reconocen al presidente Juan Guaidó”. Entonces les abrieron las puertas y “entregaron voluntariamente la sede diplomática”.
Por su parte, el diputado brasileño Paulo Pimienta, del Partido de los Trabajadores, el partido del expresidente y amigo del chavismo Lula da Silva, dijo que los delegados de Guaidó “invadieron” la embajada y “se produjo un enfrentamiento bastante violento” entre defensores y detractores de Maduro.
Paulo Pimienta también compartió un vídeo de Freddy Efrain Meregote, encargado de negocios del régimen de Maduro en Brasil, denunciando un supuesto asalto por parte de los delegados de Juan Guaidó.
El canciller de Maduro, Jorge Arreaza, no fue menos y dijo: “Denunciamos que las instalaciones de nuestra embajada en Brasilia fueron invadidas por la fuerza en la madrugada. Hacemos responsable al gobierno de Brasil por la seguridad de nuestro personal e instalaciones”.
Los funcionarios de Maduro en Brasil se rebelan y entregan la embajada a Guaidó
El último en pronunciarse en defensa de Maduro fue el Grupo de Puebla, un foro político de izquierdas en el que participan expresidentes como José Luis Rodríguez Zapatero y Ernesto Samper, así como el mandatario electo de Argentina, Alberto Fernández. Sin embargo, ninguno de estos tres sale en defensa de Maduro. Ninguno firmó la carta. Quienes sí la firman son la expresidenta de Brasil Dilma Rousseff, el dirigente del Partido de los Trabajadores Fernando Haddad, el expresidente de Paraguay Fernando Lugo, entre otros dirigentes de la izquierda.
“Solicitamos al gobierno de Brasil actuar conforme al derecho internacional que establece que la seguridad de las embajadas es responsabilidad del país que acoge a la representación. Es un imperativo insuperable garantizar las prerrogativas, privilegios e inmunidades de las misiones diplomáticas y consulares, así como la seguridad de los agentes y funcionarios para poder llevar a cabo sus deberes plena y libremente en el país en el que realizan sus actividades, sin interferencia indebida del país receptor”, dice la carta del Grupo de Puebla.