(EFE).- El Gobierno español, a través de su ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, expondrá en el Parlamento su postura sobre Venezuela tras las elecciones en las que fue proclamado vencedor el presidente del país, Nicolás Maduro, entre denuncias de fraude desde la oposición y la comunidad internacional.
El ministro comparecerá en el Senado español el próximo 13 de agosto, a petición propia, en una sesión extraordinaria de la Comisión de Asuntos Iberoamericanos.
Tras los comicios presidenciales de hace una semana, Albares ha insistido en que el resultado «debe poder verificarse con total transparencia» y para ello «es necesario presentar las actas para reconocer los resultados», con un llamamiento «a la calma, al civismo y a la garantía de los derechos fundamentales», tras las protestas en Venezuela con varios muertos y más de un millar de detenidos.
El presidente del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, es uno de los líderes europeos que ha suscrito una declaración en la que expresan su preocupación por la situación en Venezuela, piden la publicación de las actas de esos comicios y condenan cualquier amenaza contra cualquier político venezolano.
La declaración ha sido firmada por Sánchez, el presidente francés, Emmanuel Macron; el canciller alemán, Olaf Scholz; y los primeros ministros de Italia, Giorgia Meloni; Portugal, Luis Montenegro; Polonia, Donald Tusk; y Países Bajos, Dick Schoof.
Una concentración convocada por la oposición venezolana en España, dentro de una jornada de protestas en distintos países, reclamó el sábado en Madrid que no cese la presión internacional hasta que Maduro reconozca que el ganador de las elecciones es el opositor Edmundo González Urruita.