(EFE).- El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, aseguró este viernes que su Ejecutivo está trabajando para determinar cuántos migrantes latinoamericanos acogerá en virtud del acuerdo anunciado con Estados Unidos, una cifra que ha explicado que estará en función de las necesidades laborales.
Sánchez se refirió a ese acuerdo, avanzado el mes pasado, en su comparecencia ante los periodistas tras la reunión que mantuvo en la Casa Blanca con el presidente estadounidense, Joe Biden, y en la que ambos comentaron la relevancia de la colaboración en esta materia.
España, Estados Unidos y Canadá anunciaron un acuerdo para acoger a migrantes latinoamericanos que suelen emigrar a Estados Unidos y cuyas solicitudes serán ahora procesadas en unos centros que EE.UU. quiere construir pronto en Colombia y Guatemala.
Ni Madrid ni Washington han precisado hasta ahora si se ha concretado el número de migrantes que irán a España, y Sánchez insistió en que se trata de una cifra aún por determinar.
«No podemos establecer cuál es el número de los migrantes que nos van a llegar a través de esos nuevos mecanismos del programa de reasentamiento porque va a depender de las necesidades laborales que tengamos en España», explicó.
Pero sí avanzó que tanto el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, como el de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, están trabajando ya para saber la cuantía de migrantes con estatus de refugiado que podrían ir a España.
En cualquier caso, se mostró satisfecho por el acuerdo para dar una respuesta innovadora al problema de la migración, con incentivos positivos y que permita luchar contra las mafias que trafican con seres humanos.
España ya tiene acuerdos de migración circular con varios países de Latinoamérica (República Dominicana, Ecuador, Colombia, Honduras y Guatemala) para permitir que ciudadanos de esos países vayan a trabajar de manera temporal a España para suplir las necesidades del sector privado, que traslada al Gobierno español cuáles son sus necesidades de mano de obra.
Según fuentes gubernamentales españolas, cada año llegan al país entre 2.000 y 3.000 trabajadores temporales y esa cifra podría aumentar con el acuerdo alcanzado con Estados Unidos.
La reunión de Sánchez y Biden se celebró después de que dejara de aplicarse en la medianoche del jueves al viernes el llamado Título 42, que ha permitido deportar automáticamente a México a migrantes que cruzaban a Estados Unidos sin darles oportunidad de solicitar asilo y con el argumento de que era necesario aislar al país por la pandemia.
El presidente del Gobierno reiteró en la rueda de prensa algunos de los comentarios que había realizado previamente ante Biden en el Despacho Oval al inicio de la reunión y en presencia de los periodistas.
Entre ellos, el análisis sobre la situación en Ucrania, en cuyo contexto dijo que está claro que hay un agresor, Rusia, y un agredido, el pueblo ucraniano, y que hay que lograr una paz justa y duradera de acuerdo con el respeto al derecho internacional y los principios de la Carta de Naciones Unidas.
Hasta que llegue ese momento, destacó la unidad de la visión existente entre España y Estados Unidos para seguir apoyando a Ucrania frente «a la execrable guerra de Putin».
La revolución digital, la inteligencia artificial y la transformación energética dijo que fueron otros asuntos tratados y ante los que ambas Administraciones están muy alineadas, así como en la necesidad de avanzar para que la cumbre del clima COP28 que se celebrará este año sea un éxito.
Sánchez aprovechó para trasladar a Biden las líneas generales del semestre de presidencia del Consejo de la UE que asumirá España el 1 de julio, entre ellos un impulso de la relación con América Latina y Caribe y que tendrá su máxima expresión en la cumbre entre ambas regiones que se celebrará el 17 y 18 de julio en Bruselas.
