Redacción (ALN).- Los familiares y amigos de Santiago Guerrero, el niño de 5 años que murió tras caer por un tragaluz en la azotea del Colegio Humboldt, le dieron el último adiós con dibujos y globos blancos que se elevaron hasta el cielo.
Fue una emotiva despedida para un pequeño considerado como un héroe: Y es que, en su caída, Santiago evitó que otro niño que se precipitó junto a él perdiera la vida, al poner su cuerpo para amortiguar el impacto. Además, se cree que también salvó a otros, aunque esto no está claro puesto que días después del suceso no se ha ofrecido una versión oficial del accidente.
El sepelio del niño se celebró en el caraqueño Cementerio del Este. El medio Crónica Uno informó que el padre del menor, visiblemente afectado, presidió los actos. En sus manos llevaba una carpeta que no soltó. Se desconoce qué documentos llevaba.
«La capilla XII se llenó de coronas de flores blancas a partir de las 12:00 del mediodía cuando inició el velorio. A esa hora sus padres, familiares, allegados y representantes comenzaron a rodear el pequeño ataúd», agrega Crónica Uno.
Los compañeros de Santiago entregaron los dibujos de su amigo a la madre. Pese a que había muchas personas, Crónica Uno señala que reinó el silencio.
Un familiar señaló que la noticia de la muerte del niño cayó como un “balde de agua fría”. Pero rehusaron dar declaraciones en un momento de tanto dolor.
¿Demandarán al Colegio Humboldt?
Otro familiar señaló, con lágrimas en los ojos, que Santiago siempre fue un «ángel» en sus vidas, pese a su corta edad.
En medio de todo, algunos padres señalaron que no se sentían seguros de volver a dejar a sus hijos en el Colegio Humboldt, que tras la tragedia ha sufrido un gran golpe a su reputación.
«El Colegio Humboldt se encargó de cubrir los gastos del funeral y el entierro. Un familiar mencionó que le parecía ‘inútil’ proceder con una demanda contra el plantel, pues el hecho ya ocurrió y no le pueden devolver la vida a Santiago», dijo el medio.
Con información de Crónica Uno.
