(EFE).- La Fiscalía colombiana comenzó los actos investigativos para establecer los responsables en la «probable» compra y uso ilegal del software Pegasus, usado por varios Gobiernos para espionaje político, a una empresa israelí en junio de 2021, cuando el país vivía semanas de protestas sociales.
La Fiscalía, según informó este jueves en un comunicado, va a incluir esta investigación en la que ya tiene abierta por las presuntas interceptaciones y seguimientos ilegales de varias corporaciones de la Justicia, entre ellos un magistrado de la Corte Constitucional.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, desveló ayer en una alocución presidencial que la Dirección de Inteligencia Policial (Dipol) pagó en efectivo a la empresa israelí NSO Technologies y el dinero «fue transportado por vía aérea desde Bogotá a Tel Aviv el 27 de junio de 2021», donde fue declarado a aduanas e ingresado en la cuenta de la empresa.
El software israelí Pegasus, creado por la empresa israelí NSO Group Technologies Ltd., es capaz de facilitar escuchas telefónicas, el espionaje de correos electrónicos y de comunicaciones de texto mediante aplicaciones como WhatsApp, y el escaneo de documentos contenidos en la memoria de los teléfonos móviles.
«Luego de tomar atenta nota del contenido de la denuncia presentada en la alocución del presidente Gustavo Petro Urrego, la Fiscalía incorporó la información revelada públicamente por el Jefe de Estado a la indagación de los hechos puestos en conocimiento de la Fiscalía por un magistrado de la Corte Constitucional», apuntó el ente acusador.
Línea de trabajo
En esa investigación abrirá una nueva línea de trabajo «para investigar judicialmente los hallazgos del informe de transacciones inusuales, mediante el cual la entidad de investigaciones financieras de Suiza habría transmitido a la Unidad de Información y Análisis Financiero de Colombia (UIAF) el reporte de la compra en efectivo del software espía por once millones de dólares».
Y se centrará en determinar si la negociación entre la DIPOL y NSO Technologies se concretó, si la compra efectivamente se realizó, de dónde procedió el dinero, por qué se trasladó en efectivo y si la Policía sigue disponiendo del programa Pegasus y «y bajo qué normatividad legal se habría utilizado y dispuesto de él».
Ayer el mismo Petro pidió a la Fiscalía que abriera la investigación y al director de la Policía, el general William René Salamanca, encontrar el ‘software’ y entregárselo al ente acusador.
Colombia ha vivido varios casos de espionaje político y el propio presidente ha denunciado ser víctima de él. El caso más sonado fue el de las escuchas ilegales a miembros del Poder Judicial durante la presidencia de Álvaro Uribe (2002-2010), lo que derivó en un escándalo con condenas a algunos de los responsables.
Este mismo año un magistrado de la Corte Constitucional denunció un posible espionaje, que está siendo sujeto de investigación. De este caso, salió la iniciativa del presidente de pedir la información que ha derivado en desvelar esta supuesta compra de software de espionaje por parte de la inteligencia policial.