Daniel Gómez (ALN).- No es sólo que el embajador de Cuba en Caracas sea considerado por Nicolás Maduro como un ministro más. Ni que las fuerzas de seguridad estén tomadas por funcionarios de La Habana. O que en Venezuela haya más de 25.000 cubanos “cooperando” con el régimen. La presencia cubana en Venezuela es más profunda.
“Estamos invadidos. Desde hace rato”, dijo este martes el diputado venezolano, Henry Ramos Allup, en sesión parlamentaria. Y desde hace rato se refiere a Hugo Chávez. “Él tenía una dependencia glandular con Fidel Castro. Lo amaba, lo quería. Se enamoró y le dio todo, poniendo Venezuela al servicio de Castro”.
Ramos Allup cuenta que la conquista de Venezuela fue una vieja ambición de Fidel Castro. En tiempos del presidente, Rómulo Betancourt, años 60, La Habana trató de tomar el país a través de la guerrilla. “Los derrotamos con balas y votos y les dimos la oportunidad de integrarse en la política de pacificación”.
Eso hizo la guerrilla. Aceptó entrar en la política de pacificación, y los gobiernos en Venezuela, como demócratas, mantuvieron relaciones con Cuba como gesto “de distención y de respeto”. De hecho, Henry Ramos Allup recordó que la primera llamada que recibió Carlos Andrés Pérez luego del golpe de Estado de Hugo Chávez en 1992 fue de Fidel Castro. “Castro llamó para rechazar el golpe”.
Quién diría que siete años después, ese hombre al que repudió Fidel Castro por teléfono, conquistaría el poder y abriría las puertas de Venezuela a Cuba. Ahí comenzó una invasión que hoy se observa en:
– La frontera occidental la controlan los cubanos.
– Y también la frontera oriental.
– Cuba también controla las fuerzas de seguridad.
– Controla los puertos y aeropuertos.
– Controló también el reparto de comida que acabó en la tragedia de Pudreval.
Los casos de la frontera molestan especialmente a Henry Ramos Allup. El diputado asegura que Cuba, “que siempre ha sido un gobierno parásito”, hoy vive de “la chulería, la putería, las inversiones turísticas y el tráfico de drogas”. Y este último punto se controla y distribuye en la frontera con Colombia.
“La guerrilla narcoterrorista colombiana es cubana. Se ha apoderado de la frontera occidental de Venezuela, que es la que produce y distribuye el tráfico de droga”, afirmó.
“La guerrilla narcoterrorista colombiana es cubana. Se ha apoderado de la frontera occidental de Venezuela, que es la que produce y distribuye el tráfico de droga”, afirmó.
Este se trata de uno de los puntos más calientes de Venezuela. De acuerdo con los reportes de los diputados, guerrilleros del ELN y las FARC y paramilitares mueven los negocios del narco en la frontera.
Eso pasa por el Occidente de Venezuela. Por Oriente -donde también hay grupos paramilitares, e incluso células de Hezbollá, explotando el oro de Venezuela, según las denuncias del equipo de Juan Guaidó– el problema es de soberanía.
Henry Ramos Allup recordó el caso del Esequibo. Un territorio que forma parte de Guyana pero que históricamente ha sido reclamado por Venezuela. En una cumbre celebrada en marzo de 2008, Hugo Chávez menospreció ese territorio diciendo que era una artimaña de Estados Unidos para poner a los países a pelear y que era una vieja aspiración de los gobiernos de Acción Democrática. “No nos dejemos manipular”, dijo Chávez.
El problema en este asunto no sólo que Hugo Chávez pasó por alto de Guyana, sino que Cuba, el país al que Chávez rescató del periodo especial tras el abandono de la Unión Soviética, no se puso del lado de Venezuela en la reclamación del Esequibo.
“En vez de defender a la mano que le da de comer, defienden a Guyana. Y el Caricom que nos costó tanto o más que Cuba, vota a favor de la reclamación de Guyana”, apuntó Henry Ramos Allup.
El de Pudreval también es un caso significativo. Lo menciona el diputado, pero se encuentran más detalles en el diario KonZapata. Ahí se menciona el caso de la funcionaria cubana, Bárbara Castillo Cuesta. Era 2010, y una de las filiales de la PDVSA de Rafael Ramírez y Hugo Chávez, PDVAL, se dedicó a repartir e importar alimentos.
Maduro le paga a Cuba la conspiración para que Chávez lo dejara en el poder
Bárbara Castillo Cuesta dirigió la operación. Era la que mandaba. ¿Por qué? Porque era cubana es la única explicación. La funcionaria no tenía nociones de logística. Y quedó demostrado cuando más de 100.000 toneladas de alimentos se pudrieron por no tener un plan correcto de distribución.
Los otros ejemplos son ya sabidos. A nadie se le escapa la importancia del aparto cubano en las fuerzas de seguridad, en la Administración. Están los 25.000 cubanos que como dijo Maduro, “cooperan” en Venezuela. Está Dagoberto Rodríguez, embajador de Cuba en Caracas, y ahora también una especie de ministro.
Por lo anterior, y lo que expuso Henry Ramos Allup, es por lo que Juan Guaidó afirma que “Cuba tiene que ser parte de la solución”. Y lo tiene que ser porque como dijo el secretario de Estado adjunto de Estados Unidos para el Hemisferio Occidental, Michael Kozak, “Cuba es parte del problema”.