Redacción (ALN).- Ciudad Integradora es un proyecto del que se beneficiarán los migrantes venezolanos que vivan en Colombia, especialmente cerca de la frontera. Esta iniciativa busca “la promoción de oportunidades de integración económica, la facilitación del acceso a vivienda asequible de migrantes y población de acogida, al tiempo que se fortalece la capacidad institucional de los municipios y áreas metropolitanas”.
El gobierno de Colombia, la Unión Europea, Corea y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) han lanzado el proyecto Ciudad Integradora, el cual se desarrollará en las ciudades y áreas metropolitanas de Cúcuta, región fronteriza con Venezuela. La idea es proteger y brindar oportunidades a los migrantes venezolanos que residen en las localidades colombianas de Villa del Rosario, Riohacha, Maicao, Barranquilla, Medellín y Rionegro.
Según el documento de Ciudad Integradora, esto es “una apuesta integral para contribuir a mejorar la provisión de infraestructura y servicios en las ciudades, así como para responder a las demandas de la creciente población bajo criterios de equidad y sostenibilidad”.
“Este proyecto busca la promoción de oportunidades de integración económica, la facilitación del acceso a vivienda asequible de migrantes venezolanos y población de acogida, al tiempo que se fortalece la capacidad institucional de los municipios y áreas metropolitanas beneficiarias para ayudar a los migrantes y sus comunidades receptoras”, agregó.
Todas estas palabras se traducen en:
Mejorar el servicio de atención al venezolano. El proyecto pretende ayudar a los migrantes a acceder a los servicios urbanos básicos, como tener una vivienda decente, oportunidades de trabajo reales y el acceso a todo tipo de servicios sociales.
Integración económica. Una de las estrategias es la puesta en marcha de Escuelas Taller. Esta propuesta fue lanzada por el Ministerio de Cultura de Colombia para “mejorar la calidad de vida de las comunidades y salvaguardar el patrimonio de los oficios y saberes tradicionales en las nuevas generaciones”. Con esto se espera capacitar a 1.500 migrantes venezolanos como aprendices de oficios tradicionales. Además de abrirles las puertas al empleo, las regiones pueden ver favorecido su entorno con el trabajo de esos migrantes.
Eficiencia. Uno de los compromisos del programa es que el Ministerio de Vivienda de Colombia, con apoyo de autoridades locales, identifique “los municipios que han recibido mayor presión en sus indicadores habitacionales para que puedan ofrecer subsidios de arrendamiento temporales a la población migrante”. Ayudas que se gestionarían a través del Fondo de Garantía de Alquiler, el cual promete “apoyar tanto a migrantes como a personas de bajos ingresos a cumplir con los requisitos de garantías e incentivar a propietarios a ofrecer viviendas en alquiler”.
El proyecto de Ciudad Integradora fue diseñado por el BID junto a la Gerencia para la Frontera y la Migración desde Venezuela de la Presidencia de Colombia.
La Unión Europea ha donado 10,2 millones de euros para financiarlo, mientras que Corea del Sur aportó 3,3 millones de euros en cooperación técnica. El BID, por su parte, entregará créditos para “contribuir a mejorar la provisión de infraestructura y servicios” en las ciudades de la frontera.
