Redacción (ALN).- ¿Estará Estados Unidos con los opositores venezolanos que apoyan el nuevo CNE? ¿O estará con los que lo rechazan? Por lo dicho por la diplomática, Julie Chung, esta es una decisión que no lo corresponde a Washington.
«Estados Unidos apoya una solución integral y negociada a la crisis en Venezuela que aborde todos los aspectos de las condiciones necesarias para unas elecciones libres y justas. Depende de los venezolanos decidir si el nuevo Consejo Nacional Electoral [CNE] contribuye a este fin».
Eso dijo en Twitter la subsecretaria del Departamento de Estado para el Hemisferio Occidental de Estados Unidos, Julie Chung, sobre la designación del nuevo CNE. Un árbitro electoral que ha evidenciado las diferencias entre la oposición.
Esta ha sido la única declaración de un diplomático estadounidense al respecto. Y lejos de posicionarse, como han hecho la Unión Europea, la Organización de Estados Americanos y España, ha dejado en manos de los venezolanos este pronunciamiento.
Lo único que ha hecho Chung es lanzar el siguiente mensaje: «Seguimos presionando por cambios fundamentales para elecciones libres y justas incluyendo: levantar prohibiciones a partidos políticos, liberar sin condiciones a presos políticos, invitar a observadores electorales internacionales creíbles y un calendario electoral público».