Daniel Gómez (ALN).- El segundo mandato de Nicolás Maduro es ilegítimo para Madrid y Bruselas. Ya lo adelantó el ministro de Asuntos Exteriores de España, Josep Borrell, en octubre, y quedó confirmado este jueves 10 de enero. Ningún diplomático de la UE, ni siquiera de España, acude a la toma de posesión del presidente venezolano.
Ni España ni ningún gobierno de la Unión Europea enviarán representación diplomática a Caracas. Es la posición común de Bruselas frente al segundo mandato de Nicolás Maduro, que empieza este 10 de enero. La posición común que fijó el ministro de Asuntos Exteriores español, Josep Borrell.
Es significativo que España, un gobierno de izquierda, así como el de Portugal, no hayan enviado a ninguno de sus representes a la toma de posesión del segundo mandato de Maduro. Y eso que hay muchos intereses entremezclados. Pero no hay que olvidar que el mandato de Maduro, como dejó claro desde octubre Borrell, es ilegítimo.
“El 10 de enero se le acaba ese mandato, y empieza un mandato en base a unas elecciones que no reconocemos. Nosotros no reconocemos gobiernos, reconocemos Estados. Pero sí, hay un problema político, porque este señor [Maduro] a partir del 10 de enero no es un representante político”, dijo el ministro a OK Diario hace tres meses.
En el libreto de Borrell está el desconocimiento de Maduro como presidente legítimo a partir de este jueves
Borrell, todavía de visita oficial en India, le dio un giro a la línea de actuación de la UE cuando tomó la cartera de Exteriores en junio. Sin renunciar al esquema de sanciones con el que se venía manejando Bruselas, impuso lo que llamó “la solución política”. A eso remitió a ALnavío cuando conversó con el ministro en diciembre.
En el libreto de Borrell está el desconocimiento de Maduro como presidente legítimo a partir de este jueves, pero sin ignorar a los venezolanos. Quienes se quedaron en el país siguen sufriendo las consecuencias del chavismo: la hiperinflación, la falta de alimentos y de medicinas. Eso requiere una solución, pero pacífica. Así lo pensó Borrell, y así lo piensa ahora la UE.
El presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, afirmó en Twitter que el mandato de Maduro es «ilegítimo» y que la Asamblea Nacional de Venezuela, presidida por Juan Guaidó es la «única» que el Parlamento Europeo reconoce. «Seguiremos luchando para la liberación de los presos políticos y la democracia en Venezuela», añadió.
La portavoz de la diplomacia europea, Maja Kocijancic, recordó el martes que las elecciones de mayo en Venezuela no fueron “ni libres, ni creíbles, ni justas”. Por eso insistió en que se celebren unos nuevos comicios avalados por la comunidad internacional.
Para que así sea, Bruselas creará “un grupo de contacto”, compuesto de países de la UE y también de Latinoamérica, para que en Caracas, Gobierno y oposición logren “una solución política pacífica”.
Esta última frase la dijo Kocijancic, pero bien pudo ser de Borrell. Eso demuestra que su libreto se impuso en la UE. Ahora la línea de acción pasa por el acercamiento político, pero sin concesiones. Las sanciones se mantienen, y el desconocimiento al segundo mandato de Maduro también.