Daniel Gómez (ALN).- “La marcha de Reino Unido de Europa da a España una oportunidad de tener mayor liderazgo en la Unión Europea, porque se generará un hueco político”, dice el ministro español de Asuntos Exteriores, Josep Borrell.
“El mundo anglosajón se despega del mundo europeo. Esta es la gran novedad geopolítica”. Lo dijo este martes Josep Borrell, ministro de Asuntos Exteriores de España, en un acto en la Casa de América de Madrid.
En este sentido, Borrell se refirió al Brexit, como se conoce al proceso de salida de Reino Unido de la Unión Europea. Proceso que se inició el 29 de marzo de 2017 y que, en teoría, terminaba el 29 de marzo de este 2019. Sin embargo, ante la falta de acuerdos, se ha prorrogado hasta el próximo 31 de octubre.
Borrell: “La pareja francoalemana es cada vez más necesaria. Sin ellos no vamos a ninguna parte. Pero también digo que ellos solos no pueden tirar del carro”
“Reino Unido se va. Eso dicen”, apuntó el ministro. Y que se vaya, agregó, hace que Francia y Alemania, las grandes potencias europeas, sean cada vez más importantes. “La pareja francoalemana es cada vez más necesaria. Sin ellos no vamos a ninguna parte. Pero también digo que ellos solos no pueden tirar del carro”.
Aquí es cuando Borrell reivindica el papel de España. “La marcha de Reino Unido de Europa da a España una oportunidad de tener mayor liderazgo en la Unión Europea, porque se generará un hueco político”.
El Gobierno español está dispuesto a llenar el hueco que dejará el Brexit, sobre todo en un contexto en el que otras potencias como Italia no están del todo convencidas del proyecto europeo. El caso más llamativo es el del vicepresidente italiano, Mateo Salvini, quien ha creado un grupo de ultraderecha para las elecciones europeas junto a la francesa Marine Le Pen para acabar con “la pesadilla” que, dice Salvini, es la UE.
Sobre Salvini, Borrell dice que su caso le “fascina”. Porque “cuanto más insiste en colocar a los inmigrantes como enemigos, más le votan”. Incluso “en la Italia más civilizada, en las últimas regionales sacó más de 50% del voto, cuando uno podía pensar que la parte culta de Italia combatiría ese discurso”.