Redacción (ALN).- La defensa del empresario colombiano Álex Saab, en prisión preventiva en Estados Unidos mientras enfrenta un juicio por presunto lavado de dinero usando el sistema financiero de ese país, se ha topado con un error que podría dar al traste con toda la estrategia para liberarlo, que consiste en demostrar que era un diplomático al servicio de Venezuela cuando fue arrestado en Cabo Verde.
Por ahora, el proceso se ha centrado en determinar si Álex Saab, señalado de ser un presunto testaferro del presidente Nicolás Maduro, era precisamente un diplomático, un estatus que, si fuera aceptado por podría el tribunal, podría concederle la libertad.
Pero uno de los elementos mostrados como evidencia para su defensa está causando dolores de cabeza a los abogados.
Y es que, de acuerdo con el periodista de la agencia de noticias AP Joshua Goodman, la defensa del empresario colombiano presentó como prueba de su estatus como diplomático un pasaporte que termina con los números 8063.
Esos dígitos no coinciden con los número del pasaporte identificado en una carta que el 13 de junio de 2020 envió el entonces canciller chavista, Jorge Arreaza, al ministro de Exteriores de Cabo Verde, Luis Filipe Lopes Tavares, en la que abogaba por la liberación de Saab.
“Tengo a bien escribirle en referencia al ciudadano venezolano Alex Nain SAAB MORÁN, nacido el 21 de diciembre de 1971 y titular del pasaporte de la República Bolivariana de Venezuela número 146601956”, decía el documento.
Esta discrepancia podría derribar toda la estrategia de la defensa sobre la inmunidad diplomática de Saab, por cuanto el juicio por lavado continuaría.
Saab podría pasar un máximo de hasta 20 años en una prisión de Estados Unidos si fuera hallado culpable de este cargo.
Con información de Monitoreamos.