Daniel Gómez (ALN).- En Perú la presidencia se la disputan los extremos. La izquierda que representa el maestro sindicalista, Pedro Castillo. Y la derecha, que encarna Keiko Fujimori con un apellido que evoca a una época oscura. Eso explica que el primero lidere las encuestas. Y también que Fujimori, con el fin de remontar, prometa un gobierno amplio, no sólo dominado por el fujimorismo.
“Puedo decir que el perfil que se buscaría para un premier sería alguien no fujimorista, con trayectoria, capacidad técnica, una persona convocante, dialogante y que genere espacios”.
Eso dijo Keiko Fujimori, representante de Fuerza Popular, en declaraciones a la agencia Europa Press.
La aspirante a la presidencia de Perú quiere que su primer ministro sea alguien ajeno a al partido. Al fujimorismo. Lo dice porque su intención es conformar un gobierno amplio. Con otras sensibilidades políticas. Con expertos.
“Buscamos convocar a técnicos, a diferentes políticos. Soy consciente de que la convocatoria tendrá que ser muy abierta y de colores partidarios de diferentes grupos políticos y que tengan el consenso del Congreso”, explicó.
Las declaraciones de Keiko Fujimori también se enmarcan en una campaña electoral polarizada. Ella, también conocida como la hija del autócrata –Alberto Fujimori, preso por corrupción y crímenes lesa humanidad-, es para muchos la candidata del fujimorismo, un movimiento liberal en lo económico, pero autoritario en lo político.
“Yo no soy mi padre”, insiste Keiko Fujimori en campaña, al tiempo que abre la puerta a concederle un indulto.
“Yo ratifico en que el tema de mi padre, si es que se me da la confianza, yo voy a indultar a mi padre”, dijo este abril en un acto de campaña.
De su padre también alaba la Constitución, que muchos en Perú apuestan por derrocarla. “¿La Constitución de 1993 qué generó? Paz y prosperidad”, ha dicho.
Keiko Fujimori se gana el apoyo de los conservadores
En cualquier caso, los sectores más conservadores del país, entre ellos el Premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa, la colocan como “el mal menor” frente al maestro sindicalista, Pedro Castillo, representante de Perú Libre, admirador de la izquierda marxista y de los expresidentes de Bolivia y Ecuador, Evo Morales y Rafael Correa.
Es tanto el temor de Vargas Llosa por Castillo que dijo que “no se puede descartar un golpe militar” si Castillo “establece el modelo venezolano o cubano para el Perú”. Así lo afirmó en entrevista con la cadena Radioprogramas.
Otro que teme a Pedro Castillo y trasladó su apoyo a Keiko Fujimori es el candidato ultraconservador, Rafael López Aliaga, tercero en la primera vuelta electoral.
“Castillo tiene en mí un enemigo de muerte. Lo que quiere traer este señor es repartir pobreza: tanto nos ha costado dar trabajo a tanta gente para que venga un salvaje y nos destroce el país”, ha dicho López Aliaga.
Las encuestas las domina Castillo
Este apoyo de los sectores más conservadores a Keiko Fujimori, sin embargo, no queda reflejado en las encuestas.
El sondeo más reciente, divulgado por la consultora Datum, dice que Pedro Castillo posee el 41% de intención de voto por encima del 26% registrado por Keiko Fujimori. Además de dominar el voto rural, Castillo recorta distancias en Lima. Con 29% de intención de voto, está cerca del 34% que registra Keiko Fujimori.
Una encuesta anterior, elaborada por la consultora Ipsos justo después de la primera vuelta electoral, también daba como favorito a Castillo. Este aglutinaba 42% de la intención de voto, mientras que Keiko Fujimori el 31%.
Otro detalle importante es que no sólo Fujimori se aleja del fujimorismo. Pedro Castillo también evita que lo comparen con el gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela.
“Al señor Maduro le quiero decir que antes de decir algo concerniente al Perú, que primero arregle sus problemas internos, que venga y se lleve a sus compatriotas que han venido a delinquir y si no es así, yo me ratifico que el 28 de julio asumiendo el mandato emitiré un Decreto Supremo dándole 72 horas de plazo a las personas que han venido de otros países a delinquir en nuestra patria”, declaró Castillo el pasado jueves al diario peruano Caretas.