Daniel Gómez (ALN).- La dark web se encuentra en los bajos fondos de internet. Lugares alejados de la red pública en la que campean hackers, estafadores y mercadillos electrónicos de drogas, armas, y ahora también de mascarillas. Mascarillas profesionales, del tipo N95, que requieren ahora todos los países del mundo para enfrentar la pandemia. Estas se están vendiendo de forma ilícita en la dark web. El bitcoin es la moneda de pago.
Elliptic, un proveedor de análisis blockchain con sede en Londres especializado en cibercrimen, constató que en la dark web están proliferando las ventas de material médico, especialmente mascarillas, a cambio de bitcoins.
Se trata de “vendedores oportunistas de Estados Unidos, Europa y Rusia” que “aprovechan cualquier situación para suministrar bienes que son difíciles de obtener en otros lugares”, dijo Elliptic a la agencia Reuters. Se sabe que gobiernos de todo el mundo están teniendo problemas para encontrar material médico en los mercados, definidos por el gobierno de Alemania como “el salvaje oeste”.
En los portales de venta de la dark web Elliptic encontró:
– Cientos de mascarillas N95.
– Mascarillas al por mayor a tan sólo 1,5 dólares la unidad.
– Otras que se venden por casi 9 dólares cada una.
– Kits de prueba de coronavirus por 90 dólares.
– Medicamentos como la cloroquina, recomendado por el presidente de EEUU, Donald Trump.
Todo este material, agregó Elliptic, se paga con bitcoins. Una criptomoneda casi imposible de rastrear ya que prácticamente garantiza el anonimato del poseedor, así como de la transacción.
Obviamente, este tipo de operación es ilegal. La dark web es el contenido que existe en internet y que se inserta fuera de las redes que son de dominio público. Para acceder a ella hacen falta sistemas especiales. En este caso, Elliptic aplicó el motor de búsqueda Econ para sus averiguaciones.
La dark web es todo un universo sin regular. Aunque existen foros de discusión y grandes archivos de información, se trata de un lugar peligroso para inexpertos. Campean hackers con malas intenciones. Hay webs en las que se comercializan tarjetas de crédito clonadas, drogas, armas, mercenarios, virus… Ahora también mascarillas para combatir contra el coronavirus.