Antonio José Chinchetru (ALN).- Once países de tres continentes han establecido distintas limitaciones al uso de criptomonedas en su territorio. Brasil fue el último en hacerlo, proscribiendo que los fondos puedan invertir en ellas. En Ecuador y Bolivia está vetado el uso como medio de pago. En Venezuela la situación ha dado un giro de 180 grados, cuando se ha pasado de prohibir la ‘minería’ a incentivarla desde el propio Gobierno.
Según aumenta la popularidad del bitcoin y otras criptomonedas, aumenta la desconfianza de los Gobiernos hacia ellas. Brasil, Ecuador y Bolivia son los tres países latinoamericanos que han establecido diferentes tipos de restricciones sobre estas divisas digitales. En el resto del mundo lo han hecho otros ocho: Bangladesh, China, India, Islandia, Rusia, Suecia, Tailandia y Vietnam. En Venezuela el régimen de Nicolás Maduro mantiene una actitud cambiante. Tras una larga proscripción del ‘minado’ (operaciones informáticas para generar bitcoins y otras criptomonedas), ha lanzado una propia llamada petro y ha hecho llamamientos para que los jóvenes ‘minen’ tanto esta como otras.
Brasil ha sido por el momento el último de los países de América Latina donde se ha establecido limitaciones sobre el uso de criptomonedas. La Comisión de Valores Mobiliarios (CVM) emitió el mes pasado un comunicado en el que declaraba que las criptodivisas “no pueden ser calificadas como activos financieros”. El regulador prohibía a los gestores de fondos invertir de forma directa en bitcoins y similares. El veto podría ir más allá si sale adelante la propuesta realizada por el diputado Expedito Netto el pasado diciembre. Según informó Value Walk, este legislador propuso imponer penas de cárcel de uno a seis meses a quien intercambie, cree o cambie bitcoins y similares por moneda fiduciaria si no se le otorga un permiso legal.
El Banco Central de Ecuador confirmó en junio del año pasado que el uso particular de bitcoin para relaciones comerciales en el país es ilegal
El Banco Central de Ecuador confirmó en junio del año pasado que el uso particular de bitcoin para pagar compras en el país es ilegal. En un comunicado de prensa, sostuvo que no es un medio de pago autorizado. De esta manera, se señalaba la prohibición para ser usado como moneda en cualquier operación de compraventa.
Unos meses antes, en abril de 2017, el Banco Central de Bolivia fue más allá. Proscribió de forma explícita los pagos con bitcoin y cualquier otra divisa no emitida o regulada por algún país o zona económica. De esta manera, el petro (que entonces no existía) y otras criptomonedas creadas por decisión gubernamental (como la anunciada por el Ejecutivo de Vladimir Putin para Rusia) sí son legales en la nación suramericana.
El bitcoin recupera el pulso
Tras haber caído hasta los 8.000 dólares, cuando llegó a cotizarse en cerca de 20.000, la más popular de las criptomonedas está recuperando pulso. Este lunes, el bitcoin se intercambiaba a 11.000 dólares la unidad al registrar una subida del 6%, según ha informado El Economista. Ethereum avanza un 2,84% y ya roza los 1.000 dólares, según datos de Coindesk, mientras que litecoin se cotiza a 223 dólares, por tener subidas superiores al 3%.
Estas mejoras se producen a pesar de que el Banco Central Europeo (BCE) emitiera un comunicado que dice: “Nadie respalda a las criptodivisas, ninguna autoridad pública emite bitcoins. Cuando tú tienes un billete de 10 euros, por ejemplo, el BCE garantiza el derecho a pagar con él en cualquier país de la Eurozona. Sin embargo, nadie asegura el uso del bitcoin ni que vaya a conservar su valor”. Como otros organismos emisores y reguladores, el BCE mira con desconfianza las criptomonedas, si bien su uso en la Unión Europea no está prohibido.