Daniel Gómez (ALN).- El gobierno interino de Bolivia señaló este lunes a Nicolás Maduro de financiar una red de terroristas, guerrilleros de las FARC y narcotraficantes. Una red que también contó con el apoyo del gobierno de Evo Morales para, dicen, sembrar el caos en América Latina. No es la primera denuncia de este tipo, pero sí la que cuenta con mayor número de detalles. Aunque esto puede cambiar este martes. Como anunció la semana pasada el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, en la reunión del TIAR los gobiernos latinoamericanos compartirán información sobre cómo actúa Maduro en la región.
“Tenemos algo realmente alarmante, porque resulta ser que el señor Maduro, por medio de Diosdado Cabello, utilizando a su primo [Alexis Rodríguez Cabello], ha financiado todo el terror que hemos vivido los bolivianos, el terror que están viviendo los colombianos, los chilenos y los peruanos, también esto es una conspiración contra América, no sólo es contra Bolivia, obviamente se están iniciando las acciones judiciales contra estos terroristas, narcoterroristas que han ingresado a Bolivia”.
Esto afirmó el lunes Arturo Murillo, ministro interino de Gobierno en Bolivia, en una conferencia de prensa a la que acudió con el policía y director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen de Santa Cruz, Óscar Gutiérrez. Este presentó una serie de nombres que articulan esta supuesta red:
– Pedro Nel Carvajalino, un colombiano acogido por Maduro y experto en redes sociales.
– Oswaldo Rivero Curvelo, venezolano experto en redes sociales.
– Facundo Morales Schoenfeld, guerrillero argentino de las FARC, alias “Camilo”.
– Oscar Martín Serna Ponce, peruano del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru.
– Alexis Rodríguez Cabello, primo de Diosdado Cabello, número dos del régimen en Venezuela.
– Raúl García Linera, hermano del exvicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera.
Los países del TIAR investigarán el papel de Maduro en las protestas de América Latina
Según el relato de las autoridades bolivianas todo comienza el 13 de octubre. Pedro Nel Carvajalino Amaya aterrizó en Santa Cruz en un vuelo procedente de Venezuela. Le acompañaba el entonces presidente Evo Morales. Paralelamente también ingresaba a Bolivia Oswaldo Rivero Curvelo.
Nel Carvajalino y Rivero Curvelo están identificados como especialistas en guerra psicológica y terrorismo mediático. Se supone que antes habían trabajado en Argentina, Chile y Ecuador.
“Ellos ingresan con fines desestabilizadores, con fines de generar un terrorismo mediático porque es su especialidad. Son personas altamente capacitadas en cuanto a manipular las redes sociales”, explicó la policía, que les atribuye las campañas de desinformación contra el opositor Carlos Mesa y recientemente contra el gobierno interino de Jeanine Áñez.
Cabe recordar que estos dos personajes ingresan a Bolivia antes de las elecciones. Estas se celebraron el 20 de octubre. Morales intentó robárselas, pero no pudo. Por eso ahora está fuera del país.
Sobre Nel Carvajalino aportan un último dato relevante. Su pareja sería Ana Rodríguez de la Rosa, hija del comandante del Ejército Bolivariano y primo de Diosdado Cabello, Alexis Rodríguez Cabello. A este lo señalan como pieza clave de la red de desestabilización.
La policía cita otro hecho concreto: 30 octubre. Localidad de Montero. Escenario de un enfrentamiento entre opositores y seguidores de Evo Morales. Murieron tres personas.
Ahí apuntan la participación directa del guerrillero de las FARC, Facundo Morales, y del peruano Serna Ponce. Se supone que juntos habían entrenado a una narcoguerrilla de la zona para participar en estos conflictos. De hecho, Facundo Morales fue detenido por las autoridades bolivianas en el marco de estos altercados.
El paradero de Serna Ponce se ignora, pero según el informe policial, estuvo detenido “hace poco” por haber sido parte del grupo que secuestró al empresario y político Samuel Doria Medina.
Serna Ponce fue liberado por razones que todavía se ignoran. No obstante, el diario Página Siete dice que está vinculado al Movimiento Al Socialismo (MAS), el partido de Morales. La investigación policial también lo vincula con Raúl García Linera, hermano del exvicepresidente de Bolivia.
“Existen células terroristas en nuestro país que están poniendo en riesgo la seguridad de los bolivianos. No vamos a dejar de trabajar por controlar esta situación”, manifestó Marcel Rivas.
Con todo, el ministro de Gobierno dijo: “Esto es realmente una conspiración contra América, no solamente contra Bolivia, es contra parte de Latinoamérica, estamos pidiendo reunión a nuestros pares para que se les pueda dar toda la información y podamos compartirla, y obviamente se están iniciando las acciones judiciales contra estos terroristas, narcoterroristas que han ingresado a Bolivia para poder hacer lo que les dé la gana”.
Este lunes también habló Marcel Rivas, nuevo gerente de Migración Bolivia. En declaraciones recogidas por el diario Página 7, mencionó que hay células terroristas asentadas en el país por la “desconexión” de los 13 años de gobierno de Morales con la Interpol.
“Existen células terroristas en nuestro país que están poniendo en riesgo la seguridad de los bolivianos. No vamos a dejar de trabajar por controlar esta situación”, manifestó Rivas.
El funcionario también habló de los 300 venezolanos y cubanos expulsados del país. “El último operativo lo hicimos el jueves, en el cual hicimos la repatriación de alrededor de 35 ciudadanos venezolanos que estaban aquí en el país de manera irregular por más de siete meses”, agregó.
Este martes se reúnen en Bogotá los países firmantes del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca, TIAR. Como anunció el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, en la reunión del TIAR se compartirá información sobre la participación de Nicolás Maduro en las protestas en Latinoamérica. Dijo que no fue casualidad que en Colombia expulsaran a 60 venezolanos relacionados con las protestas. Ni que en Chile hicieran lo mismo con nueve venezolanos. Y lo mismo en Ecuador con 17 personas, “la mayoría venezolanos”. Así que tampoco son casualidad los 300 cubanos y venezolanos expulsados de Bolivia.
No obstante, el gobierno interino de Jeanine Áñez no puede acudir a la reunión. Evo Morales se opuso a la activación del TIAR.