María Rodríguez (ALN).- El artista venezolano Antonio Azzato reivindica el protagonismo que las Meninas merecen. Las sacó del Museo del Prado a las calles de Madrid para provocar al espectador y que este reaccione. Quiere que la gente las reconozca como un icono de Madrid y sabe que eso se logra a través de una exhibición callejera. “Se espera que seis millones de personas se fotografíen con las Meninas”, explica animado Azzato en esta entrevista con el diario ALnavío.
El artista Antonio Azzato, de madre española, padre italiano y nacido en Venezuela, es el responsable de que Las Meninas de Diego Velázquez hayan salido del Museo del Prado para llenar de mensajes las calles madrileñas hasta el próximo 15 de julio. 80 Meninas que ya son las nuevas protagonistas de la capital española en la muestra Meninas Madrid Gallery. “Se espera que seis millones de personas se fotografíen con las Meninas. Esto es algo enorme, es muy grande lo que está pasando”, afirma Azzato en esta entrevista con el diario ALnavío.
Las protagonistas de la muestra miden 180 centímetros de alto y 160 de ancho. Pesan alrededor de 30 kilogramos y están ancladas en bases de hormigón de 200 kilos. Tres de ellas son obras de Azzato y el resto llegaron en blanco a un grupo de artistas y diseñadores, además de deportistas y otras personalidades (Leer más: Un venezolano sacó a las Meninas del Prado y se las llevó a las calles de Madrid).
La lista de participantes es extensa e incluye a la diseñadora de moda Agatha Ruiz de la Prada; al pintor y escultor Alberto Bañuelos; al cantante Alejandro Sanz; al fotógrafo Alfonso Zubiaga Guecho; al cantante venezolano Carlos Baute; a la fotógrafa, pintora y directora de arte Coco Dávez; al cantante David Bisbal; al torero Enrique Ponce; al escultor Felipao; a la venezolana Margarita Vargas de Borbón; al diseñador de moda Lorenzo Caprile; a la también diseñadora Vicky Martín Berrocal y a la Asociación Nacional del Comercio Textil, Complementos y Piel, Acotex, que ha brindado un gran apoyo a la iniciativa, entre otros.
– Meninas Madrid Gallery surge de esa pasión que le despierta la obra de Velázquez y en especial el cuadro de Las Meninas. ¿Qué simbolizan las Meninas para usted?
– Llevo mucho tiempo estudiando la obra de Velázquez y específicamente Las Meninas. Y precisamente la Menina para mí es reivindicación, una silueta con unas proporciones mágicas que llaman al protagonismo. En principio no eran las protagonistas de ese cuadro. 200 años después de que se pintase llega al Museo del Prado. Lo que en un principio se llamaba Familia del Rey Felipe IV pasa a llamarse Las Meninas, que eran las sirvientas. Para mí hay algo en esa proporción áurea que engancha al espectador. Se traduce en una reivindicación y un protagonismo que ellas necesitan tener.
La gran mayoría de las Meninas que se exhiben en Madrid se subastarán con fines benéficos
– ¿Cuánto tiempo ha necesitado para darle forma a este proyecto grupal?
– Alrededor de dos años de planificación.
– “Va a dar mucho de qué hablar”, dijo usted de este proyecto. Visto lo visto, ¿objetivo cumplido?
– Sí. La verdad es que Velázquez fue un provocador para su época. Yo lo considero a él un genio. El Steve Jobs de la época. Incluso creo que fue el creador del selfie con ese cuadro en el que se metió dentro, con los reyes a un lado, para subir un poco el nivel. Y él se fotografió. Creo que hoy a través de este ejercicio se sigue provocando. Las Meninas tienen un diseño muy llamativo y unos mensajes muy potentes que están transmitiendo y están dando mucho de qué hablar. La gente no para de hacerse fotos con ellas. Las fotos están dando la vuelta al mundo.
– En la presentación de la obra, la alcaldesa madrileña, Manuela Carmena, habló de que una de las aspiraciones del proyecto era convertir a la Menina en el icono de Madrid. ¿Comparte esta visión?
– Estoy totalmente convencido de que debe ser la Menina y no otra. Las Meninas es una obra maestra de arte. Es lamentable que hoy en día haya gente que no las conozca. La misión no es sólo convertirlas en el icono de Madrid en el mundo sino lograr que toda la gente que no haya visto ese cuadro vaya al Museo del Prado, lo admire, y aquellas personas que ya lo han visto regresen y saquen sus propias conclusiones de por qué las Meninas decidieron salir a la calle. Quiero que la gente reconozca a la Menina como Madrid y eso se logra a través de una exhibición callejera. Porque cuando tú vas a una ciudad, generalmente no te quedas con lo que ves dentro de un museo, te quedas con un edificio, con una fuente, una estatua, el skyline de la ciudad… Y no había Meninas alrededor de Madrid que te invitasen a posicionarla y a identificar esa figura con esta ciudad.
– ¿No le va a dar pena que cuando acabe la exhibición desaparezcan las Meninas de las calles de Madrid?
– A mí me han inspirado bastante las Fallas de Valencia. Soy un amante del arte efímero. Esto es una especie de arte efímero. Creo que las cosas permanentes pueden llegar a perder su sentido y su atractivo. Me encantaría que esta fuese una exhibición a lo mejor recurrente, pero de manera bianual. Cada cuatro años, que las Meninas den la bienvenida a la primavera o a ciertas estaciones del año. Pero las Meninas van a darle la vuelta a otras ciudades de España y del mundo, por lo que siempre vamos a tener Meninas alrededor de nosotros.
– ¿Estas Meninas se exhibirán en otros lugares del mundo?
– Estas Meninas no. Se subastan. Esta exhibición tiene un contenido solidario. Algunas se donarán a instituciones, algunas quedarán como legado para el Ayuntamiento y otras, la gran mayoría, se van a subastar, y todo va a ser con fines benéficos.
– O sea que habrá unas nuevas.
– Siempre habrá nuevas Meninas. La idea es transmitir un mensaje. Le pregunto a los artistas que intervienen en la muestra qué es Madrid para ti y eso que lo plasmen en la silueta de la Menina. Siempre van a tener un mensaje nuevo de acuerdo a lo que se esté viviendo en el mundo en ese momento y dónde se realice la exhibición.
– ¿Qué es Madrid para Antonio Azzato?
– Madrid es una ciudad que te abraza con tal de que vengas con la idea de respetarla y amarla, como es mi caso. Y Madrid es un reto porque aquí hay gente muy competitiva. Salen millones de personas todos los días muy temprano a la calle a trabajar y a hacer las cosas bien y si tú no haces las cosas bien te quedas rezagado.
– Quizá ya se sienta madrileño…
– Madrid hoy es mi casa. Aunque soy venezolano, mi madre era española, de Llanes (Asturias) y mi padre italiano, con lo cual he tenido mucho contacto con Madrid desde pequeño. Siempre he estado viviendo entre Madrid y Caracas. De todas las veces que he estado yendo y viniendo diría que ya llevo en total 10 años viviendo en Madrid. Conozco bien la cultura de aquí, me encanta Madrid. Soy un fanático de Madrid y creo que tiene todas las posibilidades para ser la capital del mundo. Si en Madrid te quedas en tu casa sientes que te estás perdiendo algo.
– ¿Qué otra vuelta artística más se le puede dar a la obra de Velázquez después de revestir a sus Meninas?
– Yo quiero seguir dándole la vuelta al mundo con las Meninas. Tienen mucho que transmitir. Creo que Velázquez fue un genio y esa genialidad no puede estar encerrada en un museo.
– ¿Le sorprendió especialmente alguno de los diseños de los colaboradores?
– Me encantan todos, pero me quedo con los mensajes que expresan las Meninas. El que más me ha impactado es el collage que ha hecho la gente de la Fundación Aladina, de Paco Arango, con los dibujos para los niños enfermos de cáncer y los mensajes que llegan muy profundo. Uno específico, en el pecho de la Menina, dice que el éxito en la vida no se trata de vencer siempre, sino de no rendirse nunca. Eso son Meninas cargadas de sentimiento.