Carlos Moreno (ALN).- Nicolás Maduro no sabe cómo zafarse del TIAR. El tratado va ser invocado por cancilleres de América el próximo lunes en Nueva York. Y Maduro reconoce que ese mecanismo tiene el poder de seguir hundiéndolo. Jesús Eduardo Troconis, experto en Derecho Internacional, habla con el diario ALnavío sobre el golpe que asestarán al régimen los países democráticos.
Nicolás Maduro quiere distraer pero no puede, despliega 3.000 militares en la frontera con Colombia y no consigue más titulares, ofrece llevar a ONU 12 millones de firmas en contra de Donald Trump, y no tiene impacto.
Maduro quiere derrotar al Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR), pero el instrumento de defensa hemisférica, cuya activación solicitó el Gobierno de Colombia tras demostrar la alianza del régimen de Maduro con las guerrillas de las FARC y el ELN, ya comenzó a andar.
El TIAR fue impulsado por el Gobierno de Colombia el 11 de septiembre pasado en el Consejo Permanente de la OEA. Allí, el canciller Carlos Holmes Trujillo, expuso una serie de pruebas que evidencian la protección y el financiamiento del régimen de Nicolás Maduro a las guerrillas de las FARC y el ELN que han declarado la guerra al Gobierno de Iván Duque.
El lunes toma velocidad desde Nueva York con la reunión de cancilleres a favor de aplicarlo en Venezuela.
Jesús Eduardo Troconis, catedrático de Derecho Internacional de la Universidad Carlos III de Madrid, asegura que no hay dudas sobre la activación definitiva.
«Lo que se va a invocar en definitiva es la defensa y la protección de los derechos humanos, de la democracia, la libertad y la vida. Hay un proceso y eso tiene su tiempo, lo más importantes es que los derechos ahora sí se van a hacer valer», apunta Troconis.
Para el experto, pese a las posiciones diplomáticas expresadas por la mayoría de los países que apoyan el TIAR desde la Organización de Estados Americanos (OEA), de no usar la fuerza militar de momento, el planteamiento no está descartado.
El propio Gobierno de Estados Unidos y de Colombia han reiterado que no será esa la estrategia.
Para Troconis, «el escenario se reducirá al enfrentamiento de dos propuestas: El diálogo falso, sospechoso y perverso y la intervención multilateral, que puede de raíz solucionar el problema de Venezuela. Hemos sido destruidos».
Es a lo que más le teme Maduro y por ello su discurso solo enfoca esa solución para denunciar los planes de ataque en contra de su régimen.
Cierto es que la OEA dejó abierta la puerta a la intervención militar al aprobar la primera discusión de la puesta en marcha del TIAR. No se ataron de manos antes de aplicar el instrumento. Y ahora el lunes los cancilleres de los países a favor: Argentina, Brasil, Chile, Colombia, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Haití, Honduras, Paraguay, República Dominicana y Venezuela, representada por la delegación de Juan Guaidó, se reúnen en Nueva York para tomar la decisión definitiva de invocar la activación y estudiar cuáles serán las primeras medidas.
Entonces, ¿Primero negocia Maduro o primero se aplica el TIAR?
Jesús Eduardo Troconis cree que primero vendrán más sanciones y más medidas diplomáticas para cercar al régimen y sugiere que ya Maduro no tiene nada para negociar.
«Nicolás Maduro no tiene cómo negociar porque es un proscrito por la justicia, es un hombre que no tiene capacidad alguna para negociar».
Y lo demostró rompiendo las mesas de negociación facilitadas por Noruega en Oslo y Barbados donde se avanzaba en las propuestas de una elección presidencial con todas las garantías para Venezuela.
«Habrá medidas de todo orden hasta llegar a la intervención multilateral con la presencia de las fuerzas armadas», reitera Troconis.
«La responsabilidad de proteger es un deber ineludible de toda la comunidad internacional», dice y asegura que ahora la OEA y la ONU tratan el tema Venezuela con una «relación de complementariedad». Y eso potenciaría aún más la aplicación del TIAR contra Maduro. «La ONU ya entró en juego y reconoce la presión internacional».