(EFE).- Emad Al Swealmeen, el presunto autor del atentado del pasado domingo en Liverpool (noroeste de Inglaterra), se convirtió al cristianismo desde el islam y fue bautizado en 2015 y confirmado en 2017 en la catedral anglicana de esa ciudad, indicó este martes a la BBC un portavoz de la diócesis, Stuart Haynes.
El obispo Cyril Ashton, que lo confirmó y aparece con él en una foto publicada hoy por la prensa, señaló que, aunque no recordaba al sospechoso personalmente, sabe que para poder ser confirmado tuvo que «estar bien preparado en la fe cristiana».
Los Hitchcott, una pareja de feligreses que conocieron a Al Swealmeen durante un curso de cristianismo para solicitantes de asilo y que en 2017 le acogieron en su hogar unos meses, han explicado que el joven inmigrante de Oriente Medio era «un auténtico cristiano» y que compartían veladas de rezos y lectura de las escrituras.
«Era encantador. No sé lo que se torció», ha declarado a la BBC Malcolm Hitchcott, cuya esposa Elizabeth señala que están «muy tristes» por lo acontecido.
La cadena pública británica informa de que el Gobierno del Reino Unido rechazó en 2014 la petición de asilo del sospechoso -según Hitchcott, porque había tenido problemas de salud mental-, que también perdió un recurso en 2017.
Al Swealmeen murió el domingo cuando supuestamente detonó un explosivo de fabricación casera en el interior de un taxi estacionado delante de un hospital de maternidad de Liverpool, lo que causó su muerte y lesiones al conductor, David Perry, que logró salir del coche antes de encerrar dentro a su pasajero.
El Gobierno británico ha elevado de «sustancial» a «grave» el nivel de alerta terrorista -lo que significa que un atentado es «altamente probable»- por ser el segundo ataque en cuatro semanas, tras el asesinato a cuchilladas el 15 de octubre del diputado inglés David Amess en Leigh-on-Sea, en el este de Inglaterra.
Cuatro detenidos en los últimos días por su posible conexión con el suceso de Liverpool han sido liberados sin fianza, al tiempo que la Policía sigue registrando varios domicilios y trata de establecer la motivación del ataque.