Daniel Gómez (ALN).- Tamara Adrián entona el mea culpa. La diputada venezolana, la primera parlamentaria transexual de Latinoamérica, admite que el Plan País de Juan Guaidó no tiene perspectiva de género. “Fue por las urgencias”, dice en respuesta al diario ALnavío en un acto en Madrid. “Grupos feministas y trans estamos dándole una nueva perspectiva”.
Venezuela está en ruinas. Se agudiza la crisis humanitaria. La economía está colapsada. El éxodo no para de crecer…
Si logra salir de Nicolás Maduro, el Presidente Encargado, Juan Guaidó, tiene un plan para reconstruir Venezuela: el Plan País. Una implantación de reformas económicas e institucionales orientadas a promover la expansión rápida y sostenida en la capacidad de producción y consumo de los venezolanos. Pero: ¿Qué pasa con los derechos y libertades de las mujeres, de los homosexuales, de los transexuales, mermados en estas dos décadas de chavismo? ¿Hay un plan para ello?
No lo hay, pero lo habrá. Eso responde al diario ALnavío en una conferencia ofrecida en la Casa de América de Madrid, la diputada venezolana Tamara Adrián, la primera parlamentaria transexual de América Latina.
“Esperemos que el Plan País pronto incorpore una perspectiva de género. Las urgencias, como la que hay en Venezuela, hacen que a veces se deje de pensar en cosas importantes. Doy el mea culpa, porque estábamos dejando de lado lo necesario”, declara Adrián.
Lo necesario, agrega la diputada, es garantizar los derechos y las libertades que el chavismo ha olvidado. Derechos y libertades que en muchos casos afectan a las mujeres, a las personas homosexuales y transexuales. Derechos y libertades que Adrián trató de reformar en 2016 pero que el régimen de Nicolás Maduro frustró.
“En 2016 introduje un antiproyecto de una ley orgánica que regulase el matrimonio igualitario, las uniones civiles, que facilitara el reconocimiento identitario, que abordara la mutilación intersexual, el tema del vientre subrogado, los cambios de los apellidos, el tema de la maternidad… Entonces el Tribunal Supremo de Justicia cambió de criterio, y como nos quitaron cuatro diputados, no pudimos aprobar el proyecto”, recuerda.
Pese a todo, admite que ni ella ni los activistas feministas y LGTBI en Venezuela “han hecho su trabajo”. Por eso el mea culpa y por eso la siguiente promesa: “Grupos feministas y trans estamos dándole una nueva perspectiva al Plan País. Una perspectiva de género”.