Leticia Núñez (ALN).- Los aliados del expresidente de Ecuador Rafael Correa, agrupados en la Revolución Alfarista de Cataluña, como se llama su nuevo partido, manifestarán el sábado en Barcelona para “exigir la libertad de un hombre inocente”. Se refieren al exvicepresidente Jorge Glas, condenado a más de seis años de prisión por haber recibido 13,5 millones de dólares en sobornos de Odebrecht. Precisamente en Barcelona reside la madre de Glas, quien asegura que pidió “de rodillas” a su hijo que no se presentara a las pasadas elecciones.
De protesta en protesta. Si hace apenas dos semanas, los aliados del expresidente de Ecuador Rafael Correa manifestaron en Quito para pedir la libertad del exvicepresidente Jorge Glas, en prisión por asociación ilícita en el marco del caso Odebrecht, este sábado lo harán en Barcelona. Así lo anunció el propio Correa en Twitter, quien exclamó: “¡Todos somos Jorge Glas!”. La manifestación, a partir de las cuatro de la tarde, partirá desde la céntrica Plaza de Sant Jaume.
Está convocada por el Movimiento de la Revolución Alfarista de Cataluña. Es el nombre del nuevo partido del expresidente ecuatoriano, tras darse de baja del movimiento oficialista Alianza País, que él mismo fundó hace una década, pero que ahora está liderado por el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, con quien la ruptura es total. La nueva denominación rinde homenaje a José Eloy Alfaro, expresidente de Ecuador de 1897 a 1901 y de 1906 a 1911, y líder de la revolución liberal ecuatoriana.
— Rafael Correa (@MashiRafael) 27 de febrero de 2018
Así, las protestas de Correa y sus aliados traspasan fronteras. No se limitan a Quito y a los alrededores de la cárcel en la que se encuentra Glas. Este sábado llegarán a las calles de Barcelona, España, tras haberse colado en un acto de apoyo al presidente de Bolivia, Evo Morales, que se celebró la semana pasada en Madrid. Allí hubo varias pancartas donde se podía leer “Jorge Glas es un preso de Lenín Moreno”.
En esta ocasión, Correa hizo un llamamiento en Twitter a “un plantón de apoyo por la liberación de Glas”. Y agregó: ¡Unidos Ecuador! Vamos a exigir la libertad de un hombre inocente”. El exmandatario es un firme defensor de Glas, quien fue su número dos. También Glas fue número dos de Lenín Moreno, hasta que este lo apartó del cargo el pasado 3 de agosto, cuando afloraron las primeras sospechas de corrupción.
Precisamente la corrupción fue el factor determinante en el divorcio entre Moreno y Correa, apenas unos meses después de que el primero llegara a la Presidencia. Desde entonces, el cruce de acusaciones e, incluso, insultos, no ha cesado. Correa, quien califica a Glas como “preso político”, acusa al Ejecutivo de haber emprendido “una persecución política para apoderarse de la Vicepresidencia de la República”.
“El corazón de madre me anunciaba traición”
Por otra parte, se da la circunstancia de que en Barcelona vive la madre de Glas, Norma Espinel Aráuz. Lo hace desde hace casi 20 años, tal como ella misma relata en un vídeo publicado en noviembre en Va por ti Ecuador, un canal ligado a los gobiernos de Correa.
“No sé cómo Rafael sabiendo cómo era este señor [en alusión a Moreno] lo pone de candidato”
En él, pide que ayuden y que no dejen solo a su hijo, condenado a más de seis años de cárcel por presuntamente haber recibido 13,5 millones de dólares en sobornos de Odebrecht (Ver más: Ascenso y caída del vicepresidente que lo tuvo todo en Ecuador).
“El corazón de madre me anunciaba traición”, prosigue, rodeada por apenas una decena de simpatizantes del actual Movimiento de la Revolución Alfarista. Según cuenta, una amiga ya le dijo que les daba “cinco meses de plazo para la traición”. A lo que ella añade: “No fueron cinco, sino dos”.
La madre de Glas llega incluso a decir que le advirtió esto a Correa. “Eso se lo repetí a Rafael, no sé cómo Rafael sabiendo cómo era este señor [en alusión a Moreno] lo pone de candidato. A cualquiera de ustedes los hubiera puesto, pero no a este señor”. No obstante, asegura que Correa “es un hombre muy bueno y honrado como persona y como presidente”, pero que “se ha de arrepentir toda la vida” por tal decisión. Por ello, remata: “Le falló y mire cómo está el país”.
No queda ahí la cosa. En un vídeo posterior, con motivo de una manifestación en Barcelona en contra de la consulta popular que promovió el Ejecutivo de Moreno el pasado 4 de febrero, Norma Espinel confesó que había pedido “de rodillas” a su hijo que “no interviniera en estas elecciones” [las celebradas en febrero de 2017]. Pero continúa: “No me hizo caso, y yo comprendo que los hijos tienen alas propias. Yo se lo pedí porque por lo que había visto y oído más o menos presentía esto, pero no tanto”.
Ella, quien se define a sí misma como una “mujer de mucha fe”, cuenta, también en el vídeo, que a su hijo le ha dado el siguiente mensaje: “Nunca baje su frente ante nadie y sólo incline su frente ante Dios”.
Ahora la Revolución Alfarista llega a Barcelona. “Podrán cortar las flores, pero nunca podrán acabar con la primavera”, advierten los aliados de Correa.