Daniel Gómez (ALN).- Una delegación de la Mesa de Diálogo Nacional de Venezuela, que conforman representantes de Nicolás Maduro y de la oposición minoritaria, viajó a Estrasburgo. El objetivo era que este lunes fueran recibidos por el Parlamento Europeo. No será así.
El Parlamento Europeo y el gobierno de España no recibirá a los representantes de la Mesa de Diálogo Nacional de Venezuela. El eurodiputado Leopoldo López Gil, padre del opositor venezolano, Leopoldo López, ha jugado un papel clave para que esto sea así.
López Gil se enteró el viernes de la noticia por una nota de la embajada de Nicolás Maduro en Bélgica que le hicieron llegar sus compañeros del Partido Popular Europeo. Esta embajada envió una carta en la que pidió que los enviados de Maduro se reunieran este lunes y martes con eurodiputados en Estrasburgo y “les concedieran unos minutos” para explicarles la iniciativa de la mesa de diálogo.
De inmediato, López Gil se puso en contacto con la Unión Europea y con el gobierno en funciones de Pedro Sánchez. Jordi Cañas, eurodiputado de Ciudadanos, también ejerció presión a los distintos organismos desde su grupo parlamentario Renew Europe. Ambos insistieron en que Maduro ni los representantes de la oposición minoritaria son interlocutores válidos. Y no lo son porque:
– Maduro es un mandatario ilegítimo desde enero para los 28 países de la UE porque se robó las elecciones de mayo de 2018.
– La oposición minoritaria no es la oposición. Esta la representa Juan Guaidó y el grueso de la Asamblea Nacional.
La UE y el gobierno español apostaron por la coherencia y ninguno los recibirá.
Según pudo saber el diario ALnavío, los enviados de Maduro ni siquiera podrán entrar a la Eurocámara. El presidente del hemiciclo, David Sassoli, socialista, tampoco les atenderá. Todo esto gracias a la intercepción de López Gil, quien se puso en contacto hasta con el personal de seguridad en Estrasburgo, y del eurodiputado de Ciudadanos, Jordi Cañas.
En Madrid probaron suerte con el ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, y se negó. Y también se negó el secretario de Estado para Iberoamérica, Juan Pablo de la Iglesia. Aquí el eurodiputado también jugó un papel clave.
Según el diario español ABC, los enviados de Maduro son el diputado chavista Francisco Torrealba, del PSUV; la diputada Melva Paredes, de Cambiemos; Rafael Marín, de Soluciones para Venezuela; Daniel Santolo, dirigente de Avanzada Progresista; Segundo Meléndez, presidente del Movimiento al Socialismo; y Javier Bertucci, de Esperanza por el Cambio y candidato presidencial en las fraudulentas elecciones de mayo de 2018.
De acuerdo con López Gil, el viaje de los enviados por Maduro fue organizado por el expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero y por el diputado Timoteo Zambrano, líder de Cambiemos.
La agenda de los representantes de la Mesa de Diálogo Nacional también apunta hacia el Vaticano.