Alonso Moleiro (ALN).- El primer y único astronauta español ha sido investido como ministro de Ciencia, Innovación y Universidades por el nuevo gobierno socialista de Pedro Sánchez. El anuncio produjo una sorpresa general, que lo ha incluido a él mismo. La cuenta de Twitter de Duque, de momento, está impregnada todavía de los irresistibles encantos de la dinámica espacial y tiene muy poco del debate político terrenal.
Ingeniero espacial, astronauta, integrante de la misión Discovery, entre otras varias facetas que lo han hecho salir de la Tierra por varios días, entrenado en Rusia y Estados Unidos, Pedro Duque, una figura habitualmente vista con simpatía, ha conocido un curioso y comentado contrapunto como hombre público: ha sido nombrado ministro de Ciencia, Innovación y Universidades de España, por el nuevo gobierno socialista de Pedro Sánchez.
La noticia produjo una sorpresa general, que lo ha incluido a él mismo, y que se ha traducido, progresivamente, en una compartida sensación de satisfacción. Pedro Duque ingresa al Gobierno, y pone los pies en el resbaladizo mundo de la polémica, y la decisión, a primera vista, no parece haberle pesado.
Entra al gabinete socialista uno de los símbolos de la vanguardia española en la investigación científica, conocido por sus frases rotundas y sus pergaminos profesionales, que rara vez, por no decir nunca, se ha animado a cruzar la línea del debate político local para terminar empapado o pillado en alguna inconsistencia.
La cuenta de Twitter de Duque está engalanada, como pocas, con su sello: una impactante foto panorámica del planeta Tierra
Muy por el contrario. Llamado por la prensa “el astronauta mediático”, la cuenta de Twitter de Duque atestigua parte importante de la pertinencia profesional, el desenfado retórico y la solvencia técnica que le han permitido conservar la simpatía y el aprecio de sus compatriotas, y aceptar esta cartera de Gobierno sin que nadie presente objeciones de bulto. Ya alguna vez, hace un par de años, Duque tuvo que dar respuesta a un rumor que lo colocaba en la cartera de Exteriores: “Hala. Salgo ministro en la porra de un prestigioso diario”, había declarado.
Por lo demás, la cuenta de Twitter está engalanada, como pocas, con su sello: una impactante foto panorámica del planeta Tierra, en la cual el hogar de los seres humanos puede mostrar parte de sus mejores encantos: los contrastes de colores y los surcos de las nubes y mares, que el autor de la cuenta es capaz de ofrecernos sin el ruido de intermediarios, bajo la garantía de que aquella es una toma de su autoría personal.
Este tuit lo tiene ya asumiendo funciones como ministro:
Gracias por vuestra cálida acogida esta mañana en el #ISCIII @CNIO_Cancer @CNIC_CARDIO!! Emociona ver tanta gente joven y brillante entusiasmados con el futuro y a la vanguardia de la ciencia mundial pic.twitter.com/8IuqSUNnfj
— Pedro Duque (@astro_duque) 12 de junio de 2018
Aquí Duque comenta la llegada de una misión espacial llevada adelante por un grupo de colegas:
Ya está, están en tierra y les han ido a buscar. El comandante ya ha salido, ahora saldrán los otros dos https://t.co/Mq0lKMwNPD pic.twitter.com/Nakxk1AgYL
— Pedro Duque (@astro_duque) 3 de junio de 2018
Los compañeros ya están casi llegando a tierra en su nave Saiús. Todo a punto para recogerlos en la estepa de Kasajstán. Separación de los módulos exactamente ahora – comienza la reentrada. ¡Suerte! https://t.co/TPnHIAZft3
— Pedro Duque (@astro_duque) 3 de junio de 2018
Pedro Duque ha sido conocido en España como un defensor de la inversión estatal en la ciencia y la educación, y al mismo tiempo como un acérrimo crítico de la denominada peudo-ciencia, cuyas corrientes y expresiones cotidianas, incluso las más populares, han sido objeto de un ácido tratamiento de su parte. Esto había tuiteado sobre ellas hace un par de meses: “Por mucho que la industria de la homeopatía consiga, con no sabemos qué artes, que la Unión Europea o los gobiernos la amparen, eso no cambia nada. No funciona. No hace nada. Al menos nadie nos obliga a pagarles las chuches esas que venden”.
El Reiki es lo que mi abuela llamaba “cura sana culito de rana”. A los niños con pupitas los consuela mucho. https://t.co/UwOIyQDzaQ
— Pedro Duque (@astro_duque) 1 de junio de 2018
Sin ser un tuitero frecuente, la cuenta de Pedro Duque, el flamante ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, está dotada de un indiscutible encanto. Acaso sea porque, a través de los textos e imágenes, cualquiera puede asomarse el poderoso torrente material del espacio. Retrata con crudeza el tamaño de la especie humana y coloca un peso relativo a nuestros dilemas y expectativas. Hay mucho de ciencia, y poco de política, interpelaciones, justificaciones o anuncios sin contenido en los límites de su red personal.
Esta otra idea es mucho más osada: hacer un enorme agujero en Marte para poder guardar en él agua líquida (menor evaporación) y construir los habitats BAJO ESA AGUA. Una raza de submarinistas marcianos. https://t.co/LeiNd1cz2c
— Pedro Duque (@astro_duque) 2 de junio de 2018
¿Mola o no mola jugar al fútbol en ingravidez? https://t.co/mcNP4WL4YH
— Pedro Duque (@astro_duque) 1 de junio de 2018
Esta escafandra “Halcón” (Сокол) es la que se usa dentro de la nave Saiús. Aguanta estar en vacío, pero es sumanente incómoda en ese caso : apenas puedes manejar botones cuando se hincha
— Pedro Duque (@astro_duque) 28 de mayo de 2018
Se entra por una abertura ventral en la goma interna. Luego, la goma se recoge para hacerla hermética y se ata con unos cordones de la misma goma. Poca broma, aguanta diferencia de presión de casi un bar durante horas sin perder
— Pedro Duque (@astro_duque) 28 de mayo de 2018
Por supuesto por fuera de la goma hay un recubrimiento de tejido muy fuerte que es donde están las cremalleras etc. Los guantes y el casco sellan con juntas de goma entre piezas de aluminio.
— Pedro Duque (@astro_duque) 28 de mayo de 2018