Caleb Zuleta (ALN).- Es indio. Es joven. Está integrado económicamente en su país. Ahorra y paga impuestos. Así es el migrante de Centroamérica que escoge a Estados Unidos como destino, según reporta un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo. El BID realizó una encuesta en Washington DC, Los Angeles y Nueva York, las ciudades con mayor número de migrantes de la región. De allí salió el perfil. El BID encuestó a personas de El Salvador, Honduras y Guatemala.
Señala el BID que el “9% de la población de El Salvador, Guatemala y Honduras vive en Estados Unidos”. Esto suma nada más y nada menos que 3.000.000 de personas. El 60% de estos tres millones vive en Estados Unidos “de manera irregular”.
El BID elaboró un estudio. Se llama Tras los pasos del migrante: perspectivas y experiencias de la migración de El Salvador, Guatemala y Honduras en Estados Unidos. El BID levantó un perfil de ese migrante. Y encontró que:
Es joven.
De alta incidencia indígena, 15%.
Que se plantea la migración de manera temporal.
Que al llegar a EEUU se quiere quedar.
Que es de nivel educativo bajo en comparación con otros migrantes en Estados Unidos.
Que ese nivel educativo es alto en comparación con su país de origen.
Que está integrado en un 80% económicamente a su país de origen.
Que el 50% ahorra.
Que el 60% paga impuestos.
Que está expuesto, sin embargo, a riesgos de perderlo todo.
El estudio refleja que para el 74% de los migrantes la principal causa de abandonar su país es la “búsqueda de oportunidades económicas”. Le siguen, 43%, la reunificación familiar, y la violencia, 41%.
Señala que “el flujo migratorio relacionado con la reunificación familiar va a ser difícil de frenar, lo que sigue haciendo lucrativo y angular el tráfico de personas por medio de coyotes, un servicio por el que pueden pagar” entre 4.000 y 8.000 dólares y “al que los migrantes acceden mediante la ayuda de familiares (45%), préstamos (40%) o ahorros (11%)”.
El factor económico es común para el migrante de los tres países. Pero no todo es tan lineal a la hora de encontrar las otras causas. Se registran diferencias. “Se podría caracterizar la migración de Guatemala como un proyecto temporal, sin una intención de asentarse y con una mayor inversión en el país de origen. En el caso de los migrantes salvadoreños, se observa una mayor incidencia de la reunificación familiar y la intención de asentarse de manera permanente. Los migrantes hondureños, por su lado, están motivados por temas económicos y de violencia, aunque no consideran el proceso migratorio como permanente”.
La encuesta del estudio incluyó a 1.859 migrantes de El Salvador, Honduras y Guatemala que llegaron en los últimos 10 años a las tres áreas metropolitanas de Estados Unidos que acogen al 36% de esta población: Washington DC, Los Angeles y Nueva York.
Señala el estudio que “en los últimos años, la migración irregular desde esta región centroamericana ha sobrepasado a la de México, tradicionalmente el principal origen de migrantes desde el Sur hacia Estados Unidos. Anualmente más de 300.000 personas, mayoritariamente jóvenes, emprenden el viaje desde El Salvador, Honduras y Guatemala, aunque no todos logran llegar. Se estima que entre el 16% y 36% del bono demográfico de estos países se ha ido al extranjero, limitando en parte su potencial de crecimiento”.