María Rodríguez (ALN).- En la cuenta regresiva para la segunda vuelta de las elecciones chilenas Andrónico Luksic entra en escena. Se sintió aludido, como empresario, por una declaración del candidato oficialista Alejandro Guillier sobre cómo financiar la educación. “Si quiere plantear un nuevo impuesto, hágalo sin incitar al odio entre los chilenos”, espetó el magnate.
El magnate chileno Andrónico Luksic entra en campaña de cara a la segunda vuelta electoral en Chile, que se celebrará el próximo 17 de diciembre. Lo hace al sentirse aludido, como empresario, por una declaración del candidato oficialista Alejandro Guillier sobre financiar la educación “metiendo la mano en el bolsillo de quienes concentran el ingreso”.
Luksic, quien procede de la familia con mayor fortuna del país -según la revista Forbes-, contestó rotundo en Twitter a Guillier: “Si quiere plantear un nuevo impuesto, hágalo sin incitar al odio entre los chilenos. Nadie, y menos con fines electorales, puede jugar con el amor que todos tenemos por nuestra patria”.
Senador, lo que no hace patria es generar odio, lucha de clases y división. Si quiere plantear un nuevo impuesto, hágalo sin incitar al odio entre los chilenos. Nadie, y menos con fines electorales, puede jugar con el amor que todos tenemos por nuestra patria.🇨🇱 pic.twitter.com/hUXNkyWFkv
— Andrónico Luksic C. (@aluksicc) 5 décembre 2017
En sucesivos tuits en respuesta a comentarios de usuarios de Twitter, el magnate afirmó que la distribución de ingresos en Chile “es un tremendo desafío que se debe enfrentar con propuestas eficientes y responsables”. Insistió en que “es lamentable lo polarizada que se ha vuelto la campaña electoral” y dijo que espera que esta derive en un “debate más constructivo, que nos permita a los chilenos votar responsablemente”.
Guillier, por su parte, hizo un irónico llamamiento al empresario a no temer por sus propuestas. “Que no se asuste don Andrónico, porque la clase media chilena es la que ha pagado los impuestos para que unos pocos concentren la riqueza. No tiene por qué ser la clase media la única que pone el esfuerzo en el trabajo”, recalcó el candidato, según recoge el portal Eldinamo.cl.
En otro tuit que no se dirigía a Guillier sino a responder a un usuario de Twitter, Luksic subrayó que no le asusta ninguna propuesta “mientras sea planteada y discutida seriamente”. Lo que sí le preocupa, “y mucho”, es que “se utilicen consignas políticas irresponsables para dividir y polarizar al país. Chile necesita un diálogo más constructivo”, afirmó.
Leonardo, no se equivoque. No me asusto con ninguna propuesta, mientras sea planteada y discutida seriamente. Lo que sí me preocupa, y mucho, es que se utilicen consignas políticas irresponsables para dividir y polarizar al país. Chile necesita un diálogo más constructivo. https://t.co/c0lERVMh5Y
— Andrónico Luksic C. (@aluksicc) 6 décembre 2017
El magnate chileno Andrónico Luksic, quien perdió 113 millones de euros en la venta del Banco Popular, empezó a desarrollar su faceta más política en redes sociales antes de la primera vuelta de las elecciones chilenas al marcar distancia con el gobierno de Michelle Bachelet: “No voté por este Gobierno y la presidenta no es mi amiga. Este es el Gobierno que la mayoría eligió”. Luksic respondió así a un usuario que insinuó favores entre el empresario y la mandataria: “No regalé ni un crédito”, añadió Luksic.
Ahora, esta faceta más combativa también le ha valido la crítica del excandidato a la Presidencia de Chile Alejandro Navarro, quien no llegó al 1% de los votos en la primera vuelta de las elecciones. “Cada día Andrónico Luksic se parece más a Donald Trump, yo diría que en su mente no está el 2017, sino que está pensando en el 2021. Son innumerables las señales de que lo que busca no es sólo mejorar su imagen pública, sino una carrera a La Moneda [palacio presidencial]”, dijo Navarro según recoge el portal eldinamo.cl.
Asimismo, el excandidato apuntó que “si estoy en lo cierto, Luksic, como un empresario inteligente, debiera saber que no basta con cuidar su imagen personal, sino también su historia empresarial”. Un dardo que, al menos por el momento, el magnate ha ignorado desde su cuenta de Twitter, que ya tiene casi 260.000 seguidores.