Antonio José Chinchetru (ALN).- En 2006 el español Grupo Ortiz se dedicaba solamente a la construcción en España, lo que le hubiera abocado al cierre en la época de la crisis económica. Sin embargo, decidió diversificar su actividad y expandirse por América Latina. Comenzó de forma modesta en México, Perú y Colombia, con “pequeñas obras”, y en la actualidad construye carreteras y hospitales y trabaja en el despliegue de redes de telefonía móvil en la región.
El director general corporativo del Grupo Ortiz, Raúl Arce Alonso, explicó la expansión de esta firma española por América Latina en la jornada Infraestructuras en América celebrada en la Casa de América en Madrid. Relató una trayectoria en la que “hemos cometido infinidad de errores, pero también hemos aprendido y nos sirve para mejorar”. Tanto que le ha llevado a ser contratista de grandes proyectos de la Administración en México y Colombia tras haber desembarcado en la región en 2010.
“Hace 12 años éramos 100% construcción nacional y ahora la construcción nacional representa en el grupo menos de 25%. Hemos hecho un cambio radical, tanto de diversificación de líneas de negocio como de diversificación geográfica”. En la actualidad, Grupo Ortiz trabaja en cinco áreas de negocio: concesiones, energía, construcciones, servicios y patrimonial. Las dos últimas las desarrolla tan sólo en España, mientras que en las otras también trabajan en América Latina, una región en la que el grupo está presente en Colombia, México, Perú y Panamá.
“Si hubiésemos seguido con nuestra construcción nacional hubiésemos desaparecido en la crisis tan grande que ha pasado España a nivel de infraestructuras y de vivienda”, dijo Arce. Y añadió: “Iniciamos la internacionalización por necesidad, pero siempre acompañada de una estrategia. La estrategia es fundamental. Luego podrás cometer errores y los irás corrigiendo según cómo ha evolucionado una estrategia. Pero si no la tienes es difícil saber dónde vas”.
Raúl Arce: “Cuando empiezas es un mundo distinto, es un país distinto, te surgen muchas cosas que no tienes previstas y te llevan a perder dinero”
Explicó que Grupo Ortiz limita los riesgos a nivel internacional “empezando con obras muy pequeñitas. Somos una empresa pequeña-mediana, pero que no nos importa empezar con obras pequeñas”. En este sentido, afirmó: “Cuando empiezas es un mundo distinto, es un país distinto, te surgen muchas cosas que no tienes previstas y te llevan a perder dinero. Pero cuando lo haces en obras pequeñas, el 10% de una obra pequeña no es lo mismo que el 10% de una obra grande. Lo que tienes que buscar es que el aprendizaje te cueste lo menos posible”.
Los primeros países donde se establecieron fueron México, Colombia y Perú. Los eligieron “porque el plan de infraestructuras era muy grande y había seguridad jurídica, que es fundamental. Dijimos ‘en estos países vamos a estar como si estuviésemos en España’”. Tras las “obras pequeñas” fueron “subiendo de nivel, hasta lo que creemos que es el área más importante del grupo, que es concesiones. Son contratos mucho más complejos, donde tienes que invertir para sacar una rentabilidad y los errores tienen que ser cero porque te juegas tu dinero”.
4G y carreteras en Colombia y un hospital en México
Arce contó que el aterrizaje en el sector de las concesiones lo iniciaron “en Colombia, donde participamos en el contrato 4G del Gobierno y fuimos adjudicatarios de dos contratos muy importantes de carreteras, de 600 millones de euros de inversión con socios. Y luego nos adjudicamos también una iniciativa privada”. Añadió: “Hemos llegado a ese nivel en México, donde tenemos un hospital en concesión de reciente adjudicación, el año pasado. La empresa se dirige a proyectos de mayor valor añadido”.
“Los países son muy diferentes, pero existen muchas complejidades que no tenemos igual en España”
También habló de las dificultades con las que se encuentran en América Latina. Dijo: “Los países son muy diferentes, pero existen muchas complejidades que no tenemos igual en España, que hacen que las aprobaciones de cosas que no están en el proyecto lleven mucho plazo y sean arbitrajes. Y eso penaliza mucho a la empresa”.
Como otros directivos que participaron en la mesa redonda que tuvo lugar en la Casa de América, habló de obstáculos habituales en América Latina añadidos (Ver más: Las empresas españolas de infraestructuras desvelan 3 grandes problemas en América Latina). Explicó: “Si la comunicación entre españoles expatriados es difícil, porque están muy lejos, con los socios locales en muy complicada. Recuerdo un caso con el hospital de México que tenemos en concesión. Tenemos dos socios locales, tenemos consejos vía videoconferencia y no somos capaces de entendernos, y hablamos el mismo idioma”.
Ante esa situación, contó: “Llegas a la conclusión de que la única forma de entenderte es yendo allí, y a veces vas y vuelves en el mismo día. Si no, es imposible”. Y añadió: “La comunicación es muy importante, y ellos tienen el sentimiento de que si trabajas allí tienes que estar allí. Eso es muy importante y valoran que la alta dirección vaya allí”.
Relacionado con eso, apuntó: “Muchas veces buscamos optimizar recursos y pensamos que muchas cosas las podemos gestionar aquí, y hay que entender que ellos son locales y hay que ser sensibles a sus inquietudes”. Finalmente, concluyó: “Elegir un buen socio no es fácil. No conoces a nadie y eso te hace cometer errores”.
