(EFE).- El Ministerio de Trabajo y los sindicatos UGT y CC.OO. han pactado elevar 35 euros el salario mínimo interprofesional (SMI) hasta situarlo en 1.000 euros brutos en 14 pagas desde el 1 de enero de 2022.
Este incremento, anunciado este miércoles por la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, satisface las demandas de los sindicatos, mientras que la CEOE vuelve a quedarse fuera del acuerdo, tal y como ya anunció.
Tras la firma del acuerdo, la ministra ha señalado que esta subida «es un hito muy importante para el país», algo que lleva a cabo «con satisfacción y alegría», tras haber mantenido negociaciones con patronal y sindicatos desde el pasado lunes.
El Gobierno ha querido llevar el SMI al diálogo social a pesar de que la ley solo establece la mera consulta previa a los agentes sociales, según ha destacado la vicepresidenta, que ha agradecido no solo a UGT y CC. OO., sino también a la CEOE y Cepyme por haber participado en la negociación, aunque finalmente el acuerdo haya sido bipartito.
Para Díaz, alcanzar los 1.000 euros en 2022 «es un hito muy importante» para un país que venía de la legislatura previa del PP con un SMI de 735 euros brutos mensuales que condenaba a los trabajadores a la pobreza.
«Lejos de todo lo que se ha dicho, subir el SMI ha sido muy positivo para nuestro país y también para la economía (…) una distinta política de rentas es lo que hoy hace que estemos mejor que en tiempos precedentes», ha subrayado Díaz.
La vicepresidenta ha hecho hincapié en la incidencia directa que el incremento del SMI tiene en sectores más vulnerables de la población trabajadora como son los jóvenes y las mujeres, y ha recordado que desde 2019 la brecha salarial de género se ha reducido en 4,8 puntos.
«Caminamos hacia un modelo de sociedad que mira de frente a la desigualdad», ha afirmado Díaz, que ha incidido en que el Gobierno volverá a subir el SMI en 2023 para cumplir con su compromiso de alcanzar al cierre de la legislatura el 60 % del salario medio.
En este sentido, ha apuntado que volverá a convocar al Comité de Expertos para que actualice su informe de recomendaciones de subida del SMI, ya que hizo el cálculo del salario medio en base a los datos de la encuesta de estructura salarial de 2018.
Según ha dicho, la reforma laboral y el alza del SMI permiten aproximar al país a «la normalidad europea» al avanzar en la corrección de dos de las grandes anomalías del mercado laboral español, que son la precariedad ocasionada por la temporalidad y los bajos salarios.
Asimismo, ha afirmado que el alza del SMI sirve también para tirar al alza de los salarios general.
En referencia a las quejas de las organizaciones patronales sobre las dificultades para subir salarios en sectores como el campo, ha dicho que no hay datos que lo avalen puesto que la afiliación en este ámbito está en récord.
Beneficiará a 1,8 millones de trabajadores
El secretario general de CC. OO., Unai Sordo, ha mostrado su «satisfacción» resultado de la «política reivindicativa de los sindicatos» y una «muestra evidente de la obcecación que estamos teniendo» para mejorar las condiciones laborales de los más precarios».
Así, ha detallado que la subida beneficiará a 1,8 millones de trabajadores, siendo su perfil el de «una mujer de entre 16 y 34 años, con contrato temporal y empleadas en el sector agrario o en los servicios».
«La subida a 1.000 euros va al corazón de las personas que menos tienen», ha dejado claro el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, quien ha rechazado los argumentos de algunos que dicen que «el SMI destruye empleo», cuando en realidad es «un instrumento para activar la economía».