Daniel Gómez (ALN).- “Hace falta la generosidad de la comunidad internacional para resolver esta crisis”, recuerda Humberto López, vicepresidente del Banco Mundial, en el foro mundial sobre el éxodo venezolano celebrado este lunes en Bruselas.
Humberto López, vicepresidente del Banco Mundial, precisa que el éxodo venezolano le cuesta a Colombia 2.000 millones de dólares al año, y el país, por sí solo, no puede con todo.
“Hace falta la generosidad de la comunidad internacional. Hay que apoyarles, con préstamos de instituciones multilaterales, y con ayuda de todos”, dijo este lunes en el foro mundial sobre el éxodo celebrado en Bruselas.
Humberto López recordó que, en abril, el Banco Mundial entregó al gobierno de Iván Duque 31,5 millones de dólares para apoyar las cuentas de Colombia y “facilitar el acceso a empleos y servicios sociales básicos para los migrantes y refugiados”.
Sin embargo, la ayuda para Colombia y otros países receptores del éxodo no es necesariamente entregar dinero al Estado. Es, por ejemplo, “impulsar proyectos de inversión locales”, agrega Antoni Estevadeordal, consultor especial sobre inmigración del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
– Proyectos concebidos para las comunidades de migrantes, que es lo más difícil.
– Proyectos de educación y salud.
– De infraestructura básica.
– De servicios al ciudadano.
Antoni Estevadeordal insiste en que para estos proyectos hay que pensar en clave local. Para las comunidades que ya viven en el país, y para los migrantes que vienen. Y pone de ejemplo un caso visto en Ecuador.
“Es fundamental que las comunidades participen. También las propias comunidades de migrantes. En Ecuador estamos recurriendo a maestros venezolanos para que hagan proyectos de educación en casa para venezolanos y también para ecuatorianos”, dice el funcionario del BID.
En línea con lo que propone, el BID lanzó la semana pasada un fondo de 100 millones de dólares, con el apoyo de la agencia para el desarrollo de Estados Unidos, Usaid, para premiar las soluciones innovadoras pensadas para el éxodo.
Por su parte, el vicepresidente del Banco Mundial señala que la recolección de buenos datos, de indicadores que dibujen el perfil del migrante, también es un trabajo efectivo para responder a las demandas del éxodo, y conseguir que los fondos lleguen a buen destino.