Leticia Núñez (ALN).- Desde el bufete Life Abogados defienden la necesidad de “mirar más allá y no quedarse en el hoyo” para superar una crisis como la que generó la constructora Odebrecht en Perú. “Se abre una oportunidad para que las empresas españolas accedan a todos los megaproyectos que quedaron paralizados”, dice el abogado Jorge Bravo en una entrevista con ALnavío.
¿Quién dijo crisis? Donde unos ven apuros, Albert Einstein percibía oportunidades. Decía que los grandes descubrimientos y estrategias surgen de la angustia. “Quien supera la crisis se supera a sí mismo sin quedar superado”. Algo similar es lo que podría suceder tras el caso de sobornos que la constructora brasileña Odebrecht tejió en varios países de América Latina, incluido Perú. Desde el bufete Life Abogados, especializado en procesos de internacionalización de empresas, se muestran convencidos de que este escándalo de corrupción “abre una gran oportunidad para las compañías españolas”.
Odebrecht se adjudicó algunos de los proyectos de infraestructuras más importantes en la región. Pero después de que la trama de sobornos saltara a la luz, muchos quedaron paralizados. Ahí hay un hueco. Y las empresas españolas podrían ser un buen sustituto.
“Odebrecht manejaba megaproyectos. Este caso nos ha golpeado en gran parte de América Latina. Creo que ahí es donde viene la oportunidad para las firmas españolas de decir ‘bueno, esto ha sucedido, y nosotros que seguimos una línea de trabajo totalmente distinta queremos estar allá, queremos desarrollar esos proyectos, estar presentes’”, apunta Jorge Bravo Robles, director de la oficina de Life Abogados en Perú, en una entrevista con el diario ALnavío.
Como Einstein, Bravo tiene claro que “todo momento de crisis siempre es una oportunidad para comenzar de nuevo”. Cita como ejemplo la crisis económica de 2008 que azotó particularmente a España. Entonces, muchas empresas aprovecharon aquella situación para salir al mercado exterior. “Gran parte de los procesos de internacionalización de compañías españolas hacia Latinoamérica se dieron como producto de la crisis, por esa necesidad de mirar más allá y no quedarse en el hoyo”, sostiene Bravo.
Por eso, recalca: “Lo que está sucediendo en Perú es una muy buena oportunidad”. Perú es uno de los países de América Latina a los que llegaron los sobornos de Odebrecht, además de Brasil, Argentina, Colombia, República Dominicana, Ecuador, Guatemala, México, Panamá y Venezuela. La constructora cumplió 35 años en Perú en 2014. Asimismo, el caso afecta a los gobiernos de más de 15 presidentes de la región, incluido el peruano.
Según dijo Marcelo Odebrecht en un interrogatorio dirigido por fiscales peruanos, el presidente, Pedro Pablo Kuczynski, recibió fondos para su campaña electoral de 2011. También aseguró que el mandatario fue consultor de la constructora tras su segunda etapa como ministro de Economía en el gobierno de Alejandro Toledo. Kuczynski lo niega todo. A quien también se investiga por presunto blanqueo de dinero en el caso Odebrecht es a Keiko Fujimori, líder de la oposición y dos veces candidata presidencial.
Pero la sombra de Odebrecht en Perú es aún más larga. Hay tres expresidentes bajo la lupa de la Justicia: Alejandro Toledo, Alan García y Ollanta Humala, además de la esposa de éste, Nadine Heredia. Se les señala por, presuntamente, haber recibido dinero a cambio de obras que realizó la constructora brasileña entre 2005 y 2014. La investigación es tan ardua que ha requerido dos Fiscalías.
“El caso Odebrecht no tiene porqué golpear ni desmerecer el deseo de las empresas por mirar a Perú como un país de oportunidades”
Humala y Heredia comenzaron a mediados de julio a cumplir los 18 meses de prisión preventiva que pidió el juez Richard Concepción Carhuancho. A ambos se les investiga por la presunta recepción de tres millones de dólares (2,6 millones de euros) pagados por Odebrecht para financiar la campaña electoral de 2011 y el dinero “ilícito” procedente de Venezuela para la campaña de 2006.
Mientras, Alan García, presidente de Perú de 1985 a 1990 y de 2006 a 2011, está siendo investigado por presuntos sobornos pagados por la constructora brasileña para la licitación en 2009 de la Línea 1 del Metro de Lima. Y a Toledo se le acusa de haber recibido 20 millones de dólares (18,7 millones de euros) en sobornos de Odebrecht, empresa a la que habría favorecido para las obras de una carretera que une el país con Brasil. Precisamente, este lunes un juez dictó una orden de 18 meses de prisión preventiva contra cinco empresarios que habrían pagado los citados sobornos al expresidente Toledo a cambio de adjudicarse dos tramos de la Interoceánica Sur. Se les investiga por delitos de colusión agravada y lavado de activos. Entre ellos se encuentra José Graña Miró Quesada, quien durante décadas fue el presidente de Graña y Montero, la principal constructora de Perú.
“Perú es un país de oportunidades”
En una entrevista con ALnavío, el embajador de Perú en España, José Antonio García Belaúnde, calificó a Odebrecht como “un terremoto” cuyos temblores sintió toda América Latina. “Hemos estado ‘acostumbrados a ver’ casos de corrupción específicos. Lo que nunca habíamos visto es que una compañía tuviera organizado todo un departamento de corrupción con el que trabajaba a lo largo del tiempo. Estaba todo organizado para corromper y ganar licitaciones”, dijo.
García Belaúnde aseguró que por ahora el país no ha notado una disminución en el apetito inversor. Algo en lo que coincide el abogado Jorge Bravo. “El caso Odebrecht ha sido algo puntual, que no tiene porqué golpear ni desmerecer este deseo de las empresas por mirar a Perú como un país de oportunidades”.
Más allá de las oportunidades, lo que Odebrecht ha conseguido es que el Gobierno trabaje en “dos aspectos importantísimos para promover la inversión”, según Bravo. En primer lugar, reformular la ley de contratación pública. Y en segundo, reformular todo el marco legal para la promoción de asociaciones público-privadas. Ahora la pelota está en el tejado de las empresas. Como dice el abogado peruano, de ellas depende “sufrir la crisis o verla como una oportunidad”.