Redacción (ALN).- Ann Moen, jefa de Preparación y Respuesta a la Influenza de la OMS, advierte que la demanda de vacunas contra la gripe es mayor que la producción. Por eso pide a los países que den prioridad a los grupos de riesgo: mujeres embarazadas, niños, ancianos y sanitarios.
La gripe y el coronavirus no tienen nada que ver. Por eso, aunque los laboratorios de todo el mundo estén volcados en lograr una vacuna contra el covid-19, los esfuerzos para detener la influenza, el virus que provoca la gripe, no pueden quedar al margen.
“La vacuna contra la influenza no protege a las personas del covid-19, pero si puedes mantenerlas fuera del hospital por la gripe, mejor”, dijo Ann Moen, jefa de Preparación y Respuesta a la Influenza de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En una conferencia en Ginebra, la experta advirtió que “algunos países que tratan de obtener la vacuna contra la influenza no pueden hacerlo”.
“Al año sabemos que se producen alrededor de 500 millones de dosis de esas vacunas, y se producen bajo demanda. Basándonos en esos pedidos anticipados, hemos escuchado que nuestros socios de la industria han podido aumentar algunos de los cargamentos para algunos de los países y han hecho vacunas adicionales que han sido distribuidas, pero en general parece que hay una mayor demanda que la cantidad de vacunas que han sido producidas”, agregó.
La gripe es una enfermedad estacional que afecta a todo el mundo. Cada año se notifican 1.000 millones de casos, de los cuales unos cinco millones terminan siendo cuadros graves. Las cifras de muertes dependen de la temporada, pero oscilan entre las 290.000 y 650.000 anuales.
La buena noticia es que en 2020 la gripe no está siendo tan letal. El hemisferio sur ya pasó el invierno y los datos muestran que sólo el 1% de la población tuvo la enfermedad. Años atrás los indicadores hablaban de entre el 10% y el 30% de enfermos de gripe.
“Esto es realmente un mínimo histórico en términos de circulación de gripe. Y estamos seguros de que esto no se debe a la falta de pruebas o la falta de vigilancia”, afirmó Ann Moen.
Desde la OMS consideran que las medidas de protección contra el covid-19, desde el uso de mascarillas hasta las restricciones de viajes, son las responsables de que la gripe haya sido menos letal este 2020. Pero piden a los países que no se confíen.
“Estamos viendo algunos brotes esporádicos en algunas áreas del mundo, por lo que creemos que a medida que la sociedad se abra de nuevo, probablemente comenzaremos a ver que la influenza circula de nuevo a proporciones más normales”, explicó la experta.
No confiarse también significa seguir aplicando las vacunas, en especial a los grupos de riesgo: mujeres embarazadas, niños, personas mayores, individuos con problemas respiratorios y sanitarios. “Si es posible, todos estos grupos deben continuar vacunándose como la mejor manera de reducir la enfermedad”, apuntó Moen.