Redacción (ALN).- La nueva mesa de negociaciones entre el Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición de Venezuela, instalada hace días en México, es otro mecanismo para intentar destrabar la profunda crisis que atraviesa el país caribeño, pero también una vía para que ambos bandos sigan «existiendo», en medio de su descrédito generalizado, de acuerdo con la experta Mireya Rodríguez.
«Ambos (bandos) necesitan estas negociaciones para seguir existiendo, aún en los roles disminuidos que desempeñan en la real politik venezolana», dijo Rodríguez, expresidenta del Foro Mundial de Negociación, en una entrevista que publica este viernes el diario local Tal Cual.
«A mi juicio, la aceptación por parte del régimen (de Maduro) del Plan de Salvación Nacional propuesto por Guaidó es la mejor muestra de esta lectura», agregó.
Según Rodríguez, las debilidades del actual liderazgo chavista y opositor son «crecientes y sistémicas», por cuanto «podrían ser sacados los dos del tablero de juego» político por los electores en un futuro cercano.
«No en vano, las encuestas muestran que la población se inclina a votar por figuras independientes, fuera de las opciones partidistas existentes», prosiguió.
EL ESCENARIO
Tras sucesivos diálogos fracasados, el Gobierno y la oposición de Venezuela iniciaron en la capital de México una nueva negociación, con la intención de llegar a acuerdos para unas elecciones con garantías y el levantamiento de las sanciones internacionales.
En un acto público en el Museo Nacional de Antropología, en Ciudad de México, el representante de la delegación del Gobierno de Nicolás Maduro, Jorge Rodríguez, y el de la oposición, Gerardo Blyde, firmaron un memorando para dar el pistoletazo de salida a las conversaciones.
Guaidó dijo en una entrevista con CNN la semana pasada que los sectores de la oposición, que acuden a las negociaciones agrupados bajo la coalición Plataforma Unitaria, lo hacen con escepticismo, aunque «con expectativas de lograr una solución» a la crisis venezolana.
Con información de Tal Cual.