Oscar Medina (ALN).- El clan familiar de la estrella del fútbol acaba de abrir un restaurante en la turística ciudad de Gramado. Es un concepto de lujo cuyo menú se basa en el recetario tradicional de Doña Dolores, la madre del futbolista portugués.
El reto de abrir un restaurante basado en la enorme fama de tu hermano -súper estrella del deporte- es mantenerlo en el tiempo y ganarse el respeto por lo que se pone sobre la mesa más que por las fotos colgadas en las paredes. Es posible que Casa Aveiro by Dolores corra un poco ese riesgo. Un poco nada más. Porque su dueña sabe de negocios y se ha buscado buena asesoría para su primera incursión en Brasil.
Casa Aveiro by Dolores es el restaurante que acaba de abrir Katia Aveiro, la hermana cantante y emprendedora de Cristiano Ronaldo. Para su estreno en Suramérica, Katia Aveiro escogió un lugar que cuando se mira en fotos podría parecer de mentira. Pero es muy real. Se trata de la ciudad de Gramado, un municipio de montaña en Rio Grande do Sul: hortensias por todos lados, calles limpias y adornadas, frío, un lago, bosques de pinos y una arquitectura de pueblo alemán. Es, por supuesto, una zona turística. Un gran polo de turismo para los propios brasileños.
Uno de los platos estelares del menú es el Bacalao a la CR7, es decir, el plato favorito del hijo estrella de Doña Dolores
Allí en Gramado comenzó operaciones el restaurante de la hermana de Cristiano Ronaldo el pasado lunes 9 de julio. Casa Aveiro by Dolores es el primer establecimiento de comida portuguesa en la región. Y el concepto de su menú parte de una idea simple: basarse en la comida de Doña Dolores, la madre del jugador.
Simple, realmente, pero elevada a un nivel más complejo: sus recetas tradicionales son reinventadas aquí bajo una óptica contemporánea pero que no pierde nunca la conexión con el viejo recetario familiar.
Valga aquí un ejemplo: uno de los platos estelares del menú es el Bacalao a la CR7, es decir, el plato favorito del hijo estrella de Doña Dolores. Se trata de un bacalhau a la brasa pasado por aceite de oliva, con cebollas, papas, huevos, ajo y perejil.
En las entradas hay otro vínculo con la herencia del clan: el maíz frito de Madeira, cuadros de harina de maíz con col de hoja y chorizo. Seguramente el delantero no abusa mucho de este plato de su tierra, pero no importa. Suena como algo realmente delicioso.
En las opciones de cocteles hay sorpresas. El Porto Sour es una: zumo de limón, jarabe de azúcar, clara de huevo y vino de Oporto. El Mojito de Vinho Verde es otra: jugo de limón, jarabe de azúcar y vino verde. Dos emblemas de Portugal para versionar dos cocteles “clásicos” de otras latitudes.
Y, por supuesto, la carta de postre incluye los famosos Pastéis de Belém.
Gol de oro
Casa Aveiro es un local de tres pisos –el último lo ocupa la cocina- con capacidad para 200 comensales. El diseño interior pudo haber sido sobrio con las paredes de piedra blanca, pero el gancho de la imagen de CR7 no podía desaprovecharse, así como tampoco el refuerzo de la imagen del clan Aveiro. Por eso cuelgan imágenes del futbolista, de la familia (incluso en un mural que da la bienvenida al visitante), camisetas de la Selección portuguesa, del Real Madrid, de la Canarinha y hasta pantallas que muestran vídeos de los Aveiro y del hijo más famoso de Doña Dolores.
Katia lleva las riendas y cuenta con el apoyo y recetario de la madre, pero el chef es el brasileño Eduardo Natalício, oriundo de Recife e instalado en Rio Grande do Sul, donde ha estado a cargo de varios restaurantes y bares de éxito. Katia, queda claro, se buscó al mejor de la zona para la cocina.
Con todo y su fama local, Natalício ha debido adaptarse al concepto: este es un asunto de familia. En la apertura aclaró: “Cuatro o cinco platos responden a creaciones mías, pero el 90% de la carta está formado por las recetas de la familia”.
Y que sus dimensiones y concepto no confundan: este es un restaurante de lujo, con precios muy por encima del promedio de Gramado.
Quedará entonces esperar el paso del tiempo a ver si pasa de ser el local de “la hermana de Cristiano”, donde puedes comer el bacalao como le gusta a Cristiano, y se convierte en un nombre en sí mismo: Casa Aveiro by Dolores.
De momento, luce tentador y una figura como el exseleccionador de Brasil (campeón del mundo en 2002) y Portugal, Luis Felipe Scolari, le ha dado su bendición y apoyo. ¿Pasará Cristiano uno de estos días por allí? Esa siempre será una posibilidad real.