Redacción (ALN).- El gobierno de Donald Trump se plantea ampliar las sanciones al sector petrolero de Venezuela tras la celebración este domingo de la Asamblea Constituyente con la que Nicolás Maduro pretende mantenerse en el poder. Por su parte, España advierte que estudiará “las medidas adicionales que puedan ser efectivas” para restaurar la institucionalidad democrática.
Estados Unidos y España endurecen, nuevamente, el tono contra Venezuela. Ambos países han entonado un discurso muy similar tras la celebración de la Asamblea Nacional Constituyente por parte del régimen de Nicolás Maduro este domingo. El gobierno de Donald Trump baraja ampliar al sector petrolero de Venezuela las sanciones que ha venido aplicando al país, según informa el periódico The Wall Street Journal. El diario cita fuentes cercanas a las deliberaciones según las cuales el Ejecutivo estadounidense podría anunciar este lunes una nueva ronda de medidas, entre las que queda descartado un bloqueo a las importaciones de petróleo venezolano, de momento. Sí son opciones probables, de acuerdo al Journal, el veto a las exportaciones de crudo y de productos refinados estadounidenses a Venezuela y las restricciones en el uso del sistema bancario y el tipo de cambio estadounidenses para la petrolera estatal, Petróleos de Venezuela, aunque la decisión todavía no está tomada. Asimismo, las fuentes señalaron al diario que otra opción puesta sobre la mesa es prohibir a las compañías estadounidenses invertir en el sector de la energía en Venezuela. Por su parte, España aseguró que no reconocerá una Asamblea Constituyente que no sea resultado de un amplio consenso nacional, elegida conforme a reglas democráticas de sufragio universal libre, igual, directo y secreto. “No representa la voluntad mayoritaria de los venezolanos y no es la solución a los graves problemas de confrontación política y crisis humanitaria que asolan al país”, señaló el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado. Y agregó: “Conculca principios democráticos esenciales”. Por ello, España instó una vez más al gobierno de Maduro a iniciar un proceso de negociación con las instituciones democráticas legítimas y advirtió que estudiará, junto con la UE, “las medidas adicionales que puedan ser efectivas para promover una restauración de la institucionalidad democrática”.