Daniel Gómez (ALN).- El enviado especial de Estados Unidos para Venezuela, Elliott Abrams, apuntó este miércoles que la crisis en el país no se resolverá de la noche a la mañana. Que no existe una fórmula mágica. Y que el plan propuesto por Estados Unidos le parece la medida más realista para este momento. “Necesitamos un acuerdo diciendo que Maduro se tiene que ir”, apuntó Abrams.
Elliott Abrams, enviado especial del gobierno de Donald Trump para Venezuela, sugirió enero de 2021 para celebrar una elección presidencial. Una fecha tentativa, porque ahora mismo no avista una solución inmediata para resolver la crisis de Venezuela.
Este miércoles, en videoconferencia con el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales de Washington, Abrams dijo: “Quizá se piense que existe una fórmula mágica para Venezuela. Quizá se piense que Estados Unidos puede resolver esto de hoy para mañana… Hay que ser realista. Y por eso hemos hecho una proposición realista para Venezuela”.
Abrams evita dar plazos. Evita también decir si se contempla una intervención militar en caso de que Nicolás Maduro no se eche a un lado. “No quiero especular con un escenario así”, dijo.
“Sólo digo que, si piensan que la situación en Venezuela mejorará en los próximos seis meses, se equivocan. Empeorará”, agregó Abrams.
En este sentido se expresó también el exjefe de la política antinarcóticos de EEUU en el Departamento de Estado y exembajador de EEUU en Caracas, William Brownfield. En entrevista con el diario El Tiempo de Bogotá, Brownfield descartó que en Venezuela se vaya a dar una solución relámpago, como la que se produjo en 1989 en Panamá, con la invasión de EEUU.
Brownfield dijo: “Es peligroso interpretar de esa manera lo que sucedió, especialmente para aquellos en Venezuela y para la oposición creer que están próximos a ver una especie de intervención internacional como esa que menciona. No creo que eso vaya a suceder y es importante que la oposición siga concentrada en los pasos que deben tomar para acabar con esta tragedia. No deben contar con que Estados Unidos u otro entrará a solucionarles los problemas que tienen”.
Por su parte, Elliott Abrams insistió en la conferencia de este miércoles que el plan de transición presentado por el Departamento de Estado “es un buen acuerdo” para los venezolanos. Un plan que contempla la salida del poder de Maduro y demás funcionarios con cargos de narcotráfico, pero que requiere el apoyo de la Fuerza Armada y del ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López.
Abrams apuntó: “Podríamos decir que el chavismo se haga a un lado, que los militares se vayan a la cárcel y que la Asamblea Nacional tome el poder, pero eso no sería realista. Venezuela tiene problemas de seguridad y necesita a la Fuerza Armada. Mientras tanto, necesitamos un acuerdo diciendo que Maduro se tiene que ir”.
Abrams insistió que mientras Maduro siga en el Palacio de Miraflores, no habrá democracia para Venezuela. “No vemos que eso sea posible. Imaginemos una elección con Maduro en Miraflores, controlando las políticas, los colectivos, con Tareck El Aissami y Diosdado Cabello a su lado… ¿Cómo habrá una elección libre con esas circunstancias?”.
Elliott Abrams dijo que EEUU baraja distintos escenarios. Está dispuesto a realizar ajustes en su plan de transición. A lo que no está dispuesto es a permitir que Maduro siga en el poder. Si lo hace, “vendrá más presión”, advirtió.