(EFE).- Cuba despertó este miércoles a los estragos de Ian, un huracán categoría tres que arrasó la víspera su extremo occidental, con intensas lluvias y vientos de hasta 200 kilómetros por hora, y que ha causado dos muertos, enormes daños materiales y la suspensión del suministro eléctrico en todo el país.
Recién se iniciaron las tareas de evaluación y recuperación en un país que se encontraba ya antes de Ian sumido en una grave crisis multifacética: con largos apagones diarios, desabastecimiento de alimentos y medicinas, una inflación galopante y un creciente descontento político sin canalizar.
«Los daños son grandes, aunque aún no se han podido contabilizar. Ya está saliendo ayuda de todo el país. Tengan la certeza de que nos vamos a recuperar», escribió en Twitter el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, que visitó algunos de los lugares más afectados.
Estuvimos en #PinarDelRío. Los daños son grandes, aunque aún no se han podido contabilizar. Ya está saliendo ayuda de todo el país. Confiamos en los pinareños, pueblo noble, trabajador y con mucha experiencia en estas situaciones. Tengan la certeza de que nos vamos a recuperar. pic.twitter.com/zg5VNKA9sN
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) September 27, 2022
Las escenas en el epicentro de la tragedia son difícilmente narrables. Miles de árboles y postes de la luz arrancados de cuajo y vencidos contra vehículos y viviendas. Tejados levantados, cristales rotos por doquier.
Hogares inhabitables, almacenes derruidos, calles y campos de cultivo anegados, impracticables, destruidos.
Ian mientras tanto se acerca a Florida (EE. UU.) convertido ya en un huracán de categoría cuatro. El Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil señaló que ya ha dejado de constituir un peligro para Cuba y comienza la fase recuperativa en el occidente.
Huracán Ian deja dos fallecidos
En el ámbito de los daños personales, por el momento solo se ha informado de la muerte de dos personas a causa del huracán. Se trata de un hombre y una mujer a los que se les vino encima un techo y una pared de sus respectivas viviendas en la noche del lunes al martes.
Apagón general tras colapso del Sistema Eléctrico Nacional
Los daños materiales son los que empiezan a sumar una larga lista, empezando por el colapso total del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), que dejó completamente a oscuras a todo el país este martes por la noche y aún no se ha podido recuperar.
Una grave descompensación en la producción y distribución de electricidad en la red nacional durante la fase de estrés que supuso Ian llevó al final de la tarde de este martes al momento de «cero generación» de energía en todo el país, como anunció la estatal Unión Eléctrica (UNE).
Tranquilidad en las calles de La Habana, tras avería en el sistema eléctrico nacional de Cuba que dejó el país con 0 generación de energía, empresa eléctrica trabaja en restablecimiento. En la zona occidental de país, existen un grupo de líneas de transmisión fuera de servicio. pic.twitter.com/FIoHrm3PYu
— Rolando Segura (@rolandoteleSUR) September 28, 2022
Desde entonces se han conseguido poner en marcha algunos «microsistemas aislados» con grupos electrógenos de generación distribuida, lo que ha permitido pequeñas islas con corriente eléctrica en La Habana, Holguín, Las Tunas y otras provincias del país.
La inmensa mayoría de los más de 11 millones de habitantes de la isla permanecen sin corriente eléctrica desde hace 24 horas y sin perspectiva de recibirla a corto plazo.
Esto puede tener graves consecuencias sociales, más allá de la incomodidad puntual de no tener luz por la noche.
Graves consecuencias por falla eléctrica
La comida de frigoríficos y congeladores se está echando a perder en un país caribeño dominado por la escasez.
Las cocinas eléctricas no funcionan.
Los teléfonos móviles que aún no se han descargado no tienen cobertura porque las antenas dejaron de funcionar.
Las bombas que llenan los depósitos de todas las casas y que se encuentran en sus tejados no funcionan y que, por tanto, el agua no llega a los domicilios.
«No sé qué hacer. En este edificio vivimos 25 familias y todos estamos igual. No hay luz ni agua: solo queda seguir adelante», lamenta a Efe la habanera Anahy, de 28 años, junto a su vivienda, al pie del Malecón de La Habana, que quedó parcialmente inundado por el fuerte oleaje.
La UNE aspira a poder ir interconectando los distintos microsistemas y trabajar en el restablecimiento del SEN, para lo que no ha difundido plazos.
Varias centrales termoeléctricas, entre ellas Antonio Guiteras -una de las mayores-, están en «proceso de arranque».
«Tras los estragos del huracán Ian, se trabaja sin descanso en el arranque y conexión de microsistemas, para echar a andar las termoeléctricas y luego sincronizarlas con el sistema eléctrico nacional», escribió en Twitter el canciller, Bruno Rodríguez.
Tras los estragos del huracán Ian, se trabaja sin descanso en el arranque y conexión de microsistemas, para echar a andar las termoeléctricas y luego sincronizarlas con el sistema eléctrico nacional. Se espera recuperación paulatina en varios puntos del país. #FuerzaCuba pic.twitter.com/Lq3pH9VBAh
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) September 28, 2022
En las últimas horas, el Gobierno cubano ha recibido muestras de solidaridad de varios países aliados y amigos, como Venezuela, Nicaragua, Bolivia y México.