Redacción (ALN).- La represión del régimen de Daniel Ortega aumenta su sangriento balance. Este domingo murieron al menos 10 personas en ataques de policías y paramilitares sandinistas contra manifestantes. Aunque todavía no se han ofrecido cifras actualizadas, el número de muertos por la represión del régimen de Daniel Ortega ya supera los 360. El pasado fin de semana las organizaciones de derechos humanos confirmaron al menos 350 fallecidos en Nicaragua y el número ha crecido desde entonces. Este domingo fue una jornada especialmente sangrienta, con al menos 10 fallecidos, según denunció la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (Anpdh) y recogió El Nuevo Diario. Seis de los fallecidos son civiles, incluyendo dos menores de edad, y cuatro son efectivos antimotines. Los enfrentamientos más duros tuvieron lugar en Masaya, Niquinohomo, Diriá y Diriomo. En Granada, los paramilitares orteguistas realizaron una redada en la que entraron ilegalmente en numerosas viviendas y secuestraron al menos a 15 estudiantes.