Daniel Gómez (ALN).- Lo de Diosdado Cabello con Michelle Bachelet ya es personal. El número dos del chavismo, señalado por la ONU de participar “en una retórica que estigmatiza a la oposición”, dice que la alta comisionada para los Derechos Humanos no está habilitada para hablar de lo que ocurre en Venezuela. Y no lo está porque, según Cabello, Bachelet ha callado sobre la situación de Chile y Colombia. Se equivoca.
“La señora Bachelet está inhabilitada moralmente para opinar de Venezuela, está inhabilitada moralmente para opinar de derechos humanos cuando ella calla con lo que está ocurriendo en Chile, no ha abierto la boca de lo que ha ocurrido en Chile, cuando ella calla de lo que ocurre en Colombia todos los días”.
Esto dijo el número dos del chavismo, Diosdado Cabello, en una movilización en Caracas. Y se equivoca. La alta representante para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, no ha callado ni sobre Chile ni sobre Colombia. De hecho, ha sido contundente con ambos países.
En Chile, durante las protestas, advirtió que los policías de su país, los carabineros, no estaban siguiendo las normas de actuación. “Yo sé que 200 personas han sido heridas en los ojos debido al golpe de bombas lacrimógenas y balines de goma, por lo que mi juicio previo es que los protocolos no están siendo seguidos”.
Hace tres semanas, en la sesión inaugural de las sesiones de la ONU en Ginebra, Bachelet puso a Chile en el foco, comparando su caso con el de Ecuador, otro país en el que la gente se echó a la calle para reivindicar políticas más igualitarias.
De estos dos países Bachelet dijo que “es necesario garantizar la rendición de cuentas por las violaciones de los derechos humanos en el contexto de las manifestaciones y abordar las causas profundas de las protestas: las desigualdades”.
Añadió que envió recomendaciones a los gobiernos de Sebastián Piñera y Lenín Moreno, así como a la sociedad civil, para adentrarse en “una hoja de ruta sostenible guiada por las normas de derechos humanos”.
Por tanto, Diosdado Cabello miente cuando dice que Bachelet no ha hablado de Chile. Y por supuesto, miente cuando dice que calla con lo que ocurre en Colombia.
La alta comisionada fue dura con el gobierno de Iván Duque. Criticó que no se estén aplicando los procesos de paz. Denunció “que persisten altos niveles de violencia, que han generado serias violaciones de los derechos humanos, incluidas 36 masacres”. Asimismo, desde su oficina recordaron que Colombia es el país con más defensores de derechos humanos asesinados, un total de 108. Cabe recordar que nadie en el gobierno de Duque se tomó a bien el informe Bachelet, y altos funcionarios, incluido el presidente, se rebajaron al nivel de Cabello para criticarla.
Pese a todo, el número dos del chavismo dice que Bachelet calla. Que está inhabilitada moralmente. Pero tampoco es de extrañar. Lo de Cabello es una cruzada personal contra la alta comisionada, quien lo señaló personalmente de participar en una “retórica pública contra la oposición”. Desde entonces no ha tenido reparos en criticarla. Llegó a decir que estaba inhabilitada -cuando había sido ratificada por los países de la ONU- para hablar de derechos humanos porque gobernó con la Constitución de un dictador. Este martes Bachelet recordó que el régimen aplica “una retórica que estigmatiza a las víctimas”.