David Placer (ALN).- Rafael Ramírez, el exZar de la industria petrolera y expresidente de PDVSA habla desde su exilio en Europa. Ahora lo hace sobre los líderes chavistas que se mantienen en el poder con Nicolás Maduro. Uno de ellos, Diosdado Cabello. El segundo del régimen. Asegura que Cabello le confesó que está en desacuerdo con la política de Maduro, pero lo mantiene por “supervivencia” mutua.
El expresidente de Petróleos de Venezuela, PDVSA, Rafael Ramírez ha pasado de dirigir los rumbos de la industria petrolera venezolana a hacer asesorías puntuales a empresas petroleras y a gobiernos. Ahora es consultor. De eso vive, asegura desde algún lugar de Europa que no quiere mencionar. Niega que viva en un palacete, como lo acusó Nicolás Maduro.
“¿De dónde voy a sacar un palacio? Si eso fuese así, ¿crees que las autoridades financieras me darían tregua? Esto no es así, que uno se entiende con las autoridades extranjeras. Si tienes un delito, te van a juzgar con él. Y eso le pasa a Maduro. Maduro sabe que no puede salir de Venezuela. Ni Maduro, ni Diosdado ni nadie”, explica Rafael Ramírez en entrevista con el diario ALnavío. Esta es la tercera entrega de esta conversación.
-A juzgar por sus declaraciones, tiene muy mala impresión de los altos jerarcas que rodean a Maduro. ¿Mantiene amistad o buena relación con alguno?
-Sí, con muchos, pero Maduro no está rodeado de la gente de Chávez, con la excepción de dos o tres ministros. Se ha dedicado a sacarlos a todos. Se ha rodeado de gente que nadie conoce porque a Maduro le encanta tener un circo de enanos: que nadie esté por encima de él. Así se siente más cómodo. Se rodeó de gente que Chávez había rechazado, que tienen contra el presidente Chávez un recelo. La misma Delcy Rodríguez. Chávez la sacó en plena gira, la botó en plena gira, que estábamos haciendo a Moscú. Allí estaba yo con el capitán (Antonio) Morales. Y hoy Maduro le dio todo el poder (Delcy Rodríguez es vicepresidenta) para que haga y deshaga. Esa mujer siempre estuvo resentida con Chávez. El último de mis compañeros, Elías Jaua, salió y anda por ahí. Ojalá no le pase nada.
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-Hay uno que se mantiene en la órbita del gobierno, Diosdado Cabello, que lo defendió a usted y que ahora lo señala. ¿Por qué?
-Eso habría que preguntárselo a Diosdado.
– ¿Pero por qué cree usted que ocurrió ese cambio?
-No sé. Ha habido un giro terrible hacia posiciones de derechas en el sentido de traicionar todo el legado del presidente Chávez. Esa gente, alguna de esa gente que estuvo mucho tiempo con Chávez, como Nicolás Maduro y Diosdado Cabello, hoy han traicionado y destruido su obra. Debe ser un complejo, una contradicción interna tremenda que tiene Diosdado de por qué sostiene a Maduro. Cuando yo era embajador en la ONU hablábamos bastante y Diosdado no compartía lo que estaba haciendo Maduro. No sé qué acuerdo tienen allí. Es un acuerdo de supervivencia que tienen los dos, pero definitivamente ha sido responsable de sostener esta situación. Si Chávez estuviera vivo, estoy seguro de que estaría de frente contra Maduro. Porque si revisas, Maduro ha desmontado todo lo que hizo el presidente Chávez: la política petrolera, el concepto de soberanía, las misiones sociales. Hoy nuestro país y nuestro pueblo mucho más pobre que el que cuando Chávez se alzó en armas Chávez en 1992. El 83% de pobreza, nuestra moneda destruida. Maduro agradece a Dios que estemos dolarizados, pero los trabajadores no cobran en dólares. Sólo ellos y sus amigos. Han acabado con el país. Nunca como antes nuestro país ha estado tan débil, tan debilitado y Diosdado y Maduro son dos granes responsables de todo esto. Pero no son sólo ellos dos: Tareck El Aissami, Jorge Rodríguez, Delcy Rodríguez, Vladimir Padrino López, que no entiendo qué hace metiendo a los militares en esta situación, porque están comprometiendo a una institución que era referencia para el pueblo. Hoy están corrompidos sosteniendo a esta gente y cediendo nuestra soberanía. Si el presidente Chávez estuviera vivo, estaríamos junto con él derrocando a Maduro. No me cabe duda.
– ¿Qué le decía Diosdado Cabello cuando se quejaba de Nicolás Maduro?
-Él no estaba de acuerdo con lo que estaba pasando tampoco. Me decía que esperáramos, que podíamos hacer algo desde adentro. Básicamente eso era lo que yo pensaba: que se podía hacer algo desde adentro, pero después me di cuenta de que eso no era posible. Me di cuenta de que lo que creíamos que eran errores y algunos problemas de Maduro, era una nueva posición. Un nuevo giro. Maduro dio el golpe de timón que tanto decía el presidente Chávez, pero lo dio hacia la derecha.
-¿Usted cree que se ha convertido en un gobierno de derechas?
-Sin duda alguna. Primero, es un gobierno criminal. Eso no es de derechas ni de izquierdas. Eres un gobierno criminal: que mata a nuestra gente de hambre y hace que más de 4,7 millones salgan del país y que entrega la soberanía. Pero su ejecutoria desde el punto de vista económico y social es un gobierno de derechas. El paquetazo de Maduro de agosto de 2018 tiene los mismos elementos que el decretazo de Mauricio Macri. Cuando hace la megadevaluación del bolívar, se lleva todas las prestaciones de nuestros trabajadores. Le hizo el trabajo sucio a la clase empresarial llevándose la carga laboral, que son los derechos de los trabajadores. Es un gobierno anti-obrero. El hecho de que no consigas bolívares, que tengas esa megadevaluación, quiere decir que has promovido la dolarización de la economía. Y eso es anticonstitucional. Antes de que modifiques la Constitución, el bolívar es la moneda de curso legal. Es un gobierno de derechas.
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-¿Un gobierno de derechas o una dictadura de derechas?
-No vamos a encontrar más nunca una dictadura como la de Augusto Pinochet o Marcos Pérez Jiménez. Es una dictadura 2.0. Si vamos a los hechos objetivos: no hay periódicos ni prensa, pero no porque los cierren sino porque los quiebran de facto. Y si dices algo, te meten preso. Diosdado dice algo en su programa (de televisión: Con el mazo dando) e inmediatamente el Sebin va a tu casa y te mete preso, como ocurrió con el apagón eléctrico.