Daniel Gómez (ALN).- La explicación de este desastre, según el director de marketing y ventas de DHL, Nicolás Mouze, se basa en tres puntos: un limitado uso del internet móvil, el efecto de la depreciación en el poder adquisitivo de los latinoamericanos y unas comunicaciones “inseguras y defectuosas”. El comercio electrónico internacional es el gran trampolín de las pymes. Por esta vía, según señala un estudio de la compañía de transporte DHL, las empresas pueden incrementar su beneficio hasta 15%. Pero no todas las regiones están preparadas para este paso: Latinoamérica ni siquiera aparece en la publicación titulada “El comercio de las especias en el siglo XXI” porque allí “el e-commerce es un desastre”, tal como aseguró al diario ALnavío su responsable, Nicolás Mouze.
Tanto Mouze, que también es director de marketing y ventas de DHL, como José Ángel López, director de eBay España, y Ernesto Caccavale, delegado de Alibaba España, apuntaron hacia Europa, China y Estados Unidos como destinos de referencia. En las presentaciones efectuadas en el marco de las jornadas Export@ Digital, América Latina aparecía dentro del discreto “resto del mundo” dado que, en opinión de estas empresas, es “una región complicada”.
eBay solo vende en México productos previamente listados
Esta definición, en la que coincidieron López y Caccavale, la aderezó el primero narrando la experiencia de eBay en Latinoamérica. “Solo en México tenemos algo de mercado, y ni siquiera comercializamos a través de un dominio propio, lo hacemos desde el puntocom. Además, solo vendemos productos previamente listados”, apuntó López. En esta línea, añadió que “casi todo lo que compran viene de España o Estados Unidos. Vendedores locales hay muy pocos”.
Las explicaciones del desastre
Son tres los puntos, según Mouze, que explican la situación del comercio electrónico en América Latina. El primero es el consumo de internet móvil: “El 70% de las compras se realizan a través del smartphone. En la región hay muchas zonas rurales, donde la conexión de datos no existe o no tiene la potencia suficiente”.
El siguiente problema lo achaca al poder adquisitivo de los latinoamericanos. “Las monedas, con poco valor frente al dólar y al euro, son ya de por sí un lastre. A esto tenemos que sumarle los índices de desigualdad y pobreza”.
El director de marketing de DHL confía en que la situación del e-commerce en América Latina mejore / Foto: DHL
La última traba es la más importante. El director de marketing y ventas de DHL apunta que en América Latina las comunicaciones son defectuosas e inseguras. “Al cliente lo único que le preocupa es recibir su producto. Si este no llega, lo perdemos para siempre. En Costa Rica, por ejemplo, es imposible llevar la carga por carretera. Están en un estado muy malo. Luego nos encontramos con el problema de la seguridad. Una vez, yendo en camión por Colombia, nos robaron todo a punta de pistola”, apunta Mouze.
Estos relatos obligan a la compañía a moverse por avión, por lo que el producto se encarece demasiado. “Transportar la mercancía por aire dentro de un mismo país, aparte de que no tiene sentido, eleva mucho el precio de la compra. Esto no es rentable”.
Una ventana a la esperanza
Que en la actualidad el comercio electrónico sea un desastre no quiere decir que lo sea para siempre. “Las cosas cambian muy rápido. Que se lo digan a Inditex, por ejemplo. Hace cinco años Inditex no existía en internet y ahora no hay quien los pare”, recuerda Mouze, quien respalda esta llamada a la esperanza con hechos: “En América Latina se respiran vientos de cambio. Colombia vive un proceso de paz, la internacionalización que protagoniza Macri en Argentina, México y sus tiempos de cambio…”.
Con esta confianza, el director de marketing de DHL viajará a Perú los días 27 y 28 de febrero. Allí, además de intensificar los lazos importación-exportación con España, ejercerá de termómetro para ver cómo puede ir desarrollándose el comercio electrónico en el futuro.