Caleb Zuleta (ALN).- Enrique Alvarado es el embajador en Hungría de Guaidó. Alvarado se mudó hace un mes a Budapest. Y le toma el pulso a este desafío de ser el representante de un gobierno peculiar. Alvarado fue un hombre de confianza del expresidente Rafael Caldera durante 16 años. Caldera gobernó Venezuela por segunda vez entre 1994 y 1998. Le entregó el poder a Hugo Chávez. Alvarado le dice al diario ALnavío que el futuro de las relaciones de Europa con América pasa por la Europa Central.
Enrique Alvarado, embajador de Juan Guaidó en Hungría, conversó con el diario ALnavío. Señaló que “En los próximos días, está planteada la visita a Hungría y al resto de los países de la Europa Central y Austria de una importante delegación venezolana, compuesta por el diputado Francisco Sucre, presidente de la Comisión Permanente de Política Exterior de la Asamblea Nacional de Venezuela y otros altos personeros. Los demócratas venezolanos y el gobierno del Presidente Interino Juan Guaidó tenemos que replantearnos una nueva estrategia para Europa, que debe de comenzar por la Europa Central más Austria, sin dejar de lado la influencia de los países nórdicos, en todos los contextos”.
-Cuál es el estado de las relaciones entre Hungría y los Estados Unidos?
-Fue bien recibido por la Administración Trump, el discurso del primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, con ocasión de la celebración del Día de la Independencia de los Estados Unidos, en Budapest, donde fue el invitado especial. Se puede decir que hay un antes y un después en las relaciones entre Hungría y los Estados Unidos, cuando señaló: “Aquí existe un país que aprendió las lecciones de la historia. Cada vez que los países centroeuropeos se han enfrentado a Occidente han perdido. Ahora los Estados Unidos cuentan con un país dispuesto a apoyar a la OTAN como el más importante órgano de defensa del mundo y cuentan con nuestro apoyo, tanto en las mesas de negociación como en el campo de batalla”. Para los analistas políticos, este discurso fue muy oportuno, porque se hablaba de la cercanía del primer ministro húngaro, con los gobiernos de Rusia y China.
-El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, es muy cuestionado dentro y fuera de la Unión Europea, ¿cuál es la percepción que usted tiene del liderazgo de Orbán?
-Indudablemente, el primer ministro de Hungría es el líder político más importante, no sólo de Hungría, sino también de la Europa Central, del grupo de los países conocidos como Visegraf, que agrupa a Hungría, Eslovaquia, República Checa y Polonia. Pero además es un importante dirigente del Partido Popular Europeo (PPE), es muy carismático e inteligente.
-¿Cuál será el papel de los países de la Europa Central, y de Orbán, en la nueva correlación de fuerzas dentro de la Unión Europea?
-En las últimas elecciones para elegir a las nuevas autoridades de la Unión Europea, este grupo de países y el primer ministro Orbán jugaron un papel clave a la hora de escoger a las nuevas autoridades, cambiaron la tradicional correlación de fuerzas en el seno de la Unión Europea, al conseguir el retiro del candidato socialista, el holandés Frans Timmermans, quien tenía chance de obtener el máximo cargo de dirección política de la Unión Europea, y además era el candidato de consenso de la canciller alemana, Angela Merkel, del presidente francés, Emmanuel Macron y del presidente español, Pedro Sánchez. Ante el rechazo a la candidatura de Timmermans, por parte de los países de la Europa Central y del Este, presentaron la candidatura de la exministra de la Defensa de Alemania, Ursula Von der Leyen, quien resultó la elegida. Sin duda alguna dieron una demostración de fuerza y habilidad, que tendrá que ser tomada en cuenta en el futuro.
-¿Cómo ve el futuro de las relaciones entre la Unión Europea y Venezuela?
-Las relaciones entre la Unión Europea y Venezuela las percibo en un marco lleno de solidaridad y optimismo. La salida de Federica Mogherini, y la llegada del socialista español Josep Borrell, como Alto Comisionado de la política exterior de la Unión Europea, abren nuevos escenarios, nuevas perspectivas, en el manejo de la crisis venezolana, y en ella, jugarán un papel muy importante los países de la Europa Central, y por supuesto dentro de ellos, Hungría, y el primer ministro Viktor Orbán, que ya han manifestado su apoyo al Presidente Interino de Venezuela, Juan Guaidó. Soy optimista con respecto al comportamiento del Parlamento Europeo con los demócratas venezolanos; sabemos que Borrel es un demócrata a carta cabal, “un zorro viejo” de la política europea, que además ha demostrado conocer muy bien América Latina; por otra parte, recientemente en Madrid, se han realizado importantes reuniones orientadas a consolidar un trabajo profundo en el nuevo Parlamento Europeo, donde han participado importantes europarlamentarios, como Javier Zarzalejos y Leopoldo López Gil, primer venezolano electo en dicho Parlamento, sin duda la voz de Venezuela y Latinoamérica.
-¿Ha sido recibido usted como embajador de Guaidó por las autoridades húngaras?
-El gobierno húngaro ha actuado al respecto con mucha sutileza, siempre amparado en el Estatuto de Viena. La Cancillería húngara, sólo reconoce al embajador designado por el Presidente Interino Juan Guaidó como enviado en Misión Especial ante el gobierno de Hungría, y no como su embajador. Sin embargo, he sido recibido con mucha cordialidad y respeto por todos los funcionarios de la Cancillería y del resto del gobierno, así como por los diputados del Parlamento húngaro; de hecho, me mudé de Madrid a Budapest, para seguir profundizando los lazos de amistad y cooperación entre estos dos pueblos por una parte, y por la otra, para tratar de ayudar a la diáspora venezolana que vive en Hungría.
-¿Se ha podido reunir personalmente con el primer ministro Viktor Orbán?
-A pesar de tener amigos personales en común, hasta ahora no he sido recibido oficialmente por el primer ministro; sin embargo, tuve la oportunidad de saludarlo personalmente, con ocasión de la celebración del Día de la Independencia de los Estados Unidos, donde fue el invitado especial. Su trato fue de cordialidad y respeto.
-¿Cómo se explica que reconozcan a Guaidó, y no a su embajador?
-Es una situación inédita en la diplomacia mundial, dos embajadores de un mismo país. Sólo las autoridades húngaras pueden resolver ese hecho novedoso en la diplomacia, en la política y en Europa.
-¿Cuál es el futuro de las relaciones entre Hungría, Europa Central y Venezuela?
-En los próximos días, está planteada la visita a Hungría y al resto de los países de la Europa Central y Austria de una importante delegación venezolana, compuesta por el diputado Francisco Sucre, presidente de la Comisión Permanente de Política Exterior de la Asamblea Nacional de Venezuela, y otros altos personeros. Los demócratas venezolanos y el gobierno del Presidente Interino Juan Guaidó tenemos que replantearnos una nueva estrategia para Europa, que debe comenzar por la Europa Central más Austria, sin dejar de lado la influencia de los países nórdicos, en todos los contextos. Quiero destacar que ya se ha constituido un grupo de trabajo de aproximación a sus líderes nacionales, mesas de trabajo en el Parlamento de Hungría, con el presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores, doctor Zsolt Nemeth, gran amigo de los demócratas venezolanos y quien actualmente ocupa el cargo de vicepresidente nacional del partido Fidesz (Unión Cívica Húngara, de ideología conservadora nacionalista), quien además ha ganado las cuatro últimas elecciones por mayoría absoluta. El Fidesz recientemente ganó 13 de los 20 eurodiputados húngaros en el Parlamento Europeo. El doctor Nemeth es un abanderado del apoyo del gobierno húngaro al Presidente Interino Juan Guaidó y nos ha confirmado que podemos contar con su total apoyo en Hungría y Europa. Así mismo, se ha incorporado a este importante grupo la parlamentaria Monika Bathos, vicepresidenta de la Internacional Demócrata Cristiana.
-¿En qué consiste el programa de repatriación de venezolanos de origen húngaro implementado por el gobierno de Viktor Orbán, que pocos conocen?
-Quiero destacar el reconocimiento del Presidente Interino Juan Guaidó al programa implementado por el gobierno del primer ministro Viktor Orbán, de repatriación de venezolanos de origen húngaro a Budapest, es el único que existe actualmente en Europa. Hasta este momento, puedo informar que han llegado a Hungría más de 400 familias venezolanas, que gozan de múltiples beneficios que por razones de prudencia y seguridad no se pueden divulgar por ahora. Ya me he reunido con muchos de ellos en varias oportunidades, y a pesar de algunos problemas, producto de lo novedoso del programa, la gente está contenta, optimista, tratando de adaptarse a una nueva realidad, viendo su futuro y el de sus hijos con fe y esperanza.