(EFE).- El empresario colombo-venezolano Alex Saab, considerado el testaferro del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, urgió a una corte de apelaciones de EE.UU. a abordar el tema de la inmunidad diplomática en el caso por conspiración para lavado de dinero que enfrenta en un tribunal de Miami (Florida).
En un documento presentado esta semana ante la Corte de Apelaciones del Undécimo Circuito, con sede en Atlanta (Georgia), la defensa de Saab solicita desestimar la acusación argumentando que su cliente tiene inmunidad diplomática, y señala además que es ese tribunal el que deberá decidir sobre el asunto.
Esta «corte decidirá en última instancia la inmunidad en todos los eventos, y las exigencias de este caso prácticamente obligan a esta Corte a abordar el tema de la inmunidad en este momento», detalla el documento, al que tuvo acceso Efe.
La moción responde a una petición de la Fiscalía que pide desestimar la apelación presentada en abril por Saab en Atlanta a un fallo de un juez de Miami que lo califica de «prófugo de la justicia de Estados Unidos».
Según la defensa, «Saab argumentó que la Corte debería abordar la cuestión de la inmunidad, reivindicar esa inmunidad y la indiscutible inviolabilidad de Saab frente al arresto y desestimar directamente la acusación».
Agrega que «tratar a Saab como un fugitivo equivaldría a negar su inmunidad».
Para sus abogados, la corte de apelaciones debe desestimar la moción de la Fiscalía y «acelerar la argumentación y la decisión para resolver la afirmación de inmunidad de Saab lo antes posible».
El próximo 7 de enero Saab tiene una audiencia en Miami, en la que se prevé se programará la fecha del juicio, que fue retrasado después de que ambas partes consideraran que el 3 de enero, como estaba previsto, no era «realista».
Saab, de 49 años, fue extraditado a EE.UU. en octubre desde Cabo Verde, donde fue detenido el año pasado a raíz de una orden de captura internacional pedida por la Justicia estadounidense.
El empresario enfrenta un cargo de conspiración para cometer lavado de dinero en una corte de Miami, del que se declaró «no culpable» el pasado 15 de noviembre ante la jueza Alicia M. Otazo-Reyes.
Saab enfrenta una condena de unos 20 años si es hallado culpable del único cargo que tiene en la corte de Miami, pena que puede ser reducida si hace un trato con la Fiscalía, que suele incluir delación de otras personas.