Redacción (ALN).- El Sarcoma de Ewing es un cáncer que afecta a los huesos o en el tejido blando alrededor de los mismos, perjudica principalmente a los adolescentes y adultos jóvenes debido a que se suele diagnosticar antes de los 20 años de edad.
En el sarcoma de Ewing se forman tumores óseos, manifestándose bultos, inflamación, debilidad en los huesos, rigidez, pérdida de peso, fatiga y hasta fracturas espontáneas.
Un cáncer puede aparecer en cualquier parte del cuerpo. El de huesos se origina en las células de los huesos. Lo que sucede es que las células cancerosas empiezan a crecer sin control en una parte del hueso y desplazan a las células normales. Como consecuencia, al hueso se le hace complicado funcionar con normalidad.
Según datos de la Asociación Española contra el Cáncer, los sarcomas óseos son poco frecuentes y el de Ewing, más aún.
Es el segundo sarcoma que más se da en niños y adolescentes. Tiene una incidencia anual de aproximadamente 2,93 casos por cada millón de habitantes.
Síntomas más frecuentes del sarcoma de Ewing
- Dolor. Que duela la zona afectada suele ser el síntoma más frecuente. También puede presentarse como una fractura del hueso fruto de un traumatismo que en condiciones normales no hubiera supuesto la rotura.
- Que aparezca un bulto palpable.
- Aparece fiebre, pérdida de peso o cansancio.
Tratamiento
Los tratamientos estándar para el sarcoma de Ewing localizado recién diagnosticado incluyen los siguientes procedimientos:
- Quimioterapia.
- Cirugía o radioterapia.
- Quimioterapia de dosis alta con rescate de células madre.
Con información de Mejor Con Salud