Redacción (ALN).- La Casa Blanca volvió a limitar los vuelos a La Habana y canceló las actividades comerciales con el Ejército. Un viraje que podría verse reflejado en el turismo, que luce mejor que nunca. A falta de datos, el ministro cubano Manuel Marrero se muestra valiente: “No nos amilana el nuevo escenario. Hemos enfrentado a los gobernantes estadounidenses por más de 50 años”.
Estados Unidos devolvió el deshielo con Cuba al congelador. Lo anunció la Casa Blanca hace dos semanas. Un portavoz del presidente Donald Trump afirmó que se limitarán los vuelos a La Habana y se bloquearán las actividades comerciales que beneficien al Ejército cubano. Un desvío político que desde la isla se toman como un reto.
“No nos amilana el nuevo escenario. Hemos enfrentado a los gobernantes estadounidenses por más de 50 años”, aseguró el ministro de Turismo, Manuel Marrero, en declaraciones recogidas por la agencia EFE en el Festival Internacional Gourmet 2017 celebrado en Cuba.
Marrero aseguró que la nación “asumirá el reto y proseguirá avanzando” en el desarrollo del turismo. El acercamiento entre EEUU y Cuba emprendido por el expresidente Barack Obama -en diciembre de 2015- fue una buena noticia para el sector. Aunque los estadounidenses no podían viajar a La Habana como turistas, sí lo podían hacer alegando motivos religiosos, culturales, educativos, humanitarios y personales. Sin embargo, tras el viraje de Trump, se prohibieron los viajes individuales con el fin de abrir contactos con el pueblo cubano, aunque podrán hacerse en grupo, indicó EFE.
El turismo representa el sector más dinámico de la economía de Cuba: es su segunda fuente de ingresos
El ejercicio de valentía del ministro lo respaldó con datos. Indicó que el turismo muestra un crecimiento del 22% en 2017. Además, sigue confiando en cumplir con las previsiones del Gobierno, las cuales hablan de récord: superar los cuatro millones de turistas extranjeros de 2016. “Vamos a seguir haciendo bien las cosas, lograr mayores inversiones, desarrollar este sector que es un impulsor de la economía nacional”, recalcó Marrero.
En línea con la temática gourmet del evento, Manuel Marrero destacó el rescate de tradiciones culinarias y la cultura del bar y elogió el desarrollo del sector privado en Cuba, que cuenta actualmente con más de 2.000 restaurantes particulares y 22.000 habitaciones para el turismo.
Reseñó EFE que la isla caribeña ha experimentado un boom turístico en los últimos años, en coincidencia con el proceso de deshielo diplomático iniciado con Estados Unidos. A partir de entonces comenzaron a crecer los visitantes estadounidenses y en 2016 viajaron a Cuba unos 285.000 estadounidenses, mientras que entre enero y mayo de este año llegaron 284.565 estadounidenses a la isla, según datos oficiales.
Y es que el turismo representa el sector más dinámico de la economía de Cuba. Es la segunda fuente de ingresos, por detrás de la venta de servicios profesionales al exterior. Ahora toca esperar a ver cómo afecta el paso atrás de Estados Unidos a las cuentas de la nación. El paso atrás no es definitivo: “Habrá cotas, de forma que si hay liberación de presos o elecciones, avanzaremos”, matizó el portavoz de la Casa Blanca.