Antonio José Chinchetru (ALN).- Como primer secretario del Partido Comunista de Cuba, Raúl Castro sigue detentando el poder. Él mismo se ha encargado de recordar la supremacía del PCC sobre el Estado. El nuevo presidente del país, Miguel Díaz-Canel, también reconoce explícitamente esta jerarquía en el mando.
En numerosos medios de comunicación de todo el mundo se está hablando de que Cuba ha entrado en el “post-castrismo”. Con más frecuencia, incluso, se asegura que Raúl Castro ya no está en el poder. Sin embargo, la realidad es la contraria. El régimen instaurado en 1959 por Fidel Castro y su hermano sigue ejerciendo la autoridad suprema en el país. Así lo establece la Constitución cubana y lo reconoció Miguel Díaz-Canel en su primer discurso como nuevo presidente del Consejo de Estado y del Consejo de Ministros.
La Constitución de Cuba establece en su artículo 5: “El Partido Comunista de Cuba, vanguardia organizada marxista-leninista de la clase obrera, es la fuerza dirigente de la sociedad y del Estado, que organiza y orienta los esfuerzos comunes hacia los altos fines de la construcción del socialismo y el avance hacia la sociedad comunista”. De esta manera, los órganos de dirección del PCC tienen primacía sobre los del Estado. Raúl Castro es el primer secretario de dicho partido. Por lo tanto, al seguir detentando la jefatura de la organización, le permite conservar el poder por encima del presidente del país.
Raúl Castro: “No pretendemos modificar el carácter irrevocable del socialismo en nuestro sistema político y social”
El historiador y abogado español Guillermo Gortázar, expresidente de la Fundación Hispano-Cubana, considera que el régimen castrista se mantiene intacto. En declaraciones al diario ALnavío ha dicho: “El actual presidente Díaz-Canel simplemente es un mascarón de proa. Quien sigue teniendo todos los resortes del poder es Raúl Castro, de tal modo que este señor no va a poder actuar por sí mismo para nada. Todo va a estar dirigido desde la nomenclatura y la gerontocracia. Hasta que no desaparezca definitivamente esa generación, y singularmente Raúl Castro, ahí no va a haber ninguna posibilidad de evolución y de cambio”.
En su larga intervención de este jueves ante la Asamblea Nacional del Poder Popular (el Parlamento del régimen comunista cubano), el propio Castro dejó claro que no se abre un periodo de cambios. Afirmó: “No pretendemos modificar el carácter irrevocable del socialismo en nuestro sistema político y social, ni el papel dirigente del Partido Comunista de Cuba, como vanguardia organizada y fuerza dirigente superior de la sociedad y el Estado”. Añadió que en la próxima Constitución que se apruebe “defenderemos que se mantenga” el actual artículo 5.
Díaz-Canel reconoce a Raúl Castro como superior
En su primer discurso como presidente, Díaz-Canel también dejó claro que el régimen castrista se va a mantener. “En esta legislatura no habrá espacio para los que aspiran a una restauración capitalista; esta legislatura defenderá a la revolución y continuará el perfeccionamiento del socialismo”, afirmó. También sentenció: “Digámoslo con todas sus letras: la revolución cubana sigue de verde olivo, dispuesta a todos los combates”.
Díaz-Canel: “Raúl Castro se mantiene por legitimidad y mérito propio al frente de la vanguardia política”
Además, dejó claro que el menor de los hermanos Castro sigue al frente del régimen a pesar de haberle cedido el testigo en la Presidencia del país. Señaló que “sólo el Partido Comunista de Cuba, fuerza dirigente superior de la sociedad y el Estado, garantiza la unidad de la nación cubana”. Y añadió: “Por eso Raúl (Castro) se mantiene por legitimidad y mérito propio al frente de la vanguardia política”.
Acto seguido, dijo: “Él sigue siendo nuestro primer secretario, como el referente que es para cualquier comunista y revolucionario cubano”.
Ante los poco más de 600 diputados de la Asamblea Nacional, sostuvo: “Asumo la responsabilidad para la que se me ha elegido con la convicción de que todos los revolucionarios cubanos, desde la posición que ocupemos, desde la labor que realicemos, desde cualquier puesto de trabajo o trinchera de la patria socialista, seremos fieles al ejemplar legado del comandante en jefe Fidel Castro Ruz, líder histórico de nuestra revolución, y también al ejemplo, el valor y las enseñanzas del general del Ejército Raúl Castro Ruz, líder actual del proceso revolucionario”.
Esta referencia a Raúl Castro como “líder actual del proceso revolucionario” es otro reconocimiento a la supremacía del primer secretario del PCC.
Alejandro Castro, pieza clave del régimen
Raúl Castro no sólo se garantiza el poder al mantener el puesto de primer secretario del PCC. Va a contar con la ayuda inestimable de su hijo Alejandro Castro, quien está al frente de los servicios de inteligencia del país. Además, es un hombre clave en las relaciones con Rusia, hasta el punto de que ha viajado a ese país con una periodicidad anual en los últimos cuatro años.
El Kremlin se ha convertido en el principal soporte del régimen castrista (Ver más: Vladimir Putin retoma la Guerra Fría en el Caribe de la mano de Raúl Castro). Por este motivo, contar con el apoyo de Moscú otorga una gran fuerza en la estructura del sistema comunista cubano y garantiza la fortaleza de la familia Castro dentro del mismo. El propio Raúl Castro quiso recordar en su discurso ante la Asamblea Nacional la importancia de los vínculos con el gobierno de Vladimir Putin. Afirmó: “Las relaciones bilaterales con la Federación de Rusia se han incrementado de manera sustantiva en todas las esferas, sobre la base del beneficio mutuo”.