Juan Carlos Zapata (ALN).- Diego Arria, excandidato presidencial, exministro, exgobernador de Caracas, diplomático, y expresidente del Consejo de Seguridad de la ONU, analiza para ALnavío este escenario de guerra. En verdad, la intervención en Venezuela ya no se descarta. ¿Pero cómo puede producirse? ¿Cuál sería la magnitud? No hay tema más caliente en América que el caso venezolano. De la crisis de la democracia y el tránsito a la dictadura se pasó al éxodo masivo y ahora a la posibilidad de la intervención militar. La opción está sobre la mesa. Este domingo, el diario ABC de Madrid entró en detalles. Tituló: ‘El Polvorín Iberoamericano’.
Diego Arria es un firme convencido de que la intervención militar de Venezuela está sobre la mesa. Sobre la mesa de Donald Trump. Ya no se ocultan las formas. Ni los gestos ni los discursos. Ni lo que se dice en Twitter. Para Arria, el cuadro venezolano va unido a tres aspectos clave para una operación de este calibre. El primero es el de un Estado que es un narco-Estado. El segundo, un régimen que ha empobrecido a todo un país. Y el tercero, el terrorismo. Todo eso junto, señala, indica que el régimen de Nicolás Maduro no es sólo un peligro para los venezolanos sino también para el resto del mundo. Ya es grave, muy grave, pensar que los iraníes han cortado distancia con Estados Unidos al tener presencia en Venezuela, apunta. Y agrega que tampoco es nada comparable lo que pasa en Venezuela con lo que ocurría en Panamá, y en Panamá se decidió por la intervención para sacar a Manuel Antonio Noruega del poder. Manuel Antonio Noriega era la cabeza de un régimen criminal, y era narcotraficante. En perspectiva, “un niño de pecho al lado del Chapo Cabello (Diosdado Cabello) y de Nicolás Maduro y sus generales”. La operación militar en Venezuela sería para desalojar al régimen. No para echar mano de Maduro. Esto sería un error.
–De España a Washington, de Caracas a Nueva York, de Bogotá a Buenos Aires, se habla de intervención militar en Venezuela. ¿Estamos ante ese riesgo?
-En la medida en que Venezuela sea reconocida como Estado promotor del terrorismo y gobernado por narcotraficantes, las posibilidades son altísimas.
-¿Es un Estado terrorista?
-Venezuela tiene asentados en su territorio grupos terroristas y narcoterroristas como los disidentes de las FARC, el ELN, factores de Hezbollá que sin la menor duda son un peligro. Es una amenaza cierta para Colombia, que acaba de iniciar un proceso de paz, que los elementos de la violencia estén alojados en Venezuela.
“En la medida en que Venezuela sea reconocida como Estado promotor del terrorismo y gobernado por narcotraficantes, las posibilidades son altísimas”
-Todo esto nos lleva a que el plan de intervención está sobre la mesa del Gobierno de los Estados Unidos.
-No está para nada excluido. Pero se está en la fase disuasiva. Si la fase disuasiva no tiene éxito se pasará a la siguiente. Pero de la fase disuasiva a la fase de ejecución hay una brecha grande. Al Irak de Saddam Hussein se le estuvieron haciendo ensayos disuasivos sin éxito alguno. Después se produjo la invasión.
-¿Es intervención o invasión?
-La palabra invasión es muy abstracta. No es acertada en el desarrollo de los conflictos actuales.
-¿Cuál es la diferencia?
-Tenemos la guerra cibernética. Se puede doblegar a una Fuerza Armada sin poner una sola bota en tierra. En este caso se podría paralizar todo el sistema de comunicaciones que utiliza la Fuerza Armada de Venezuela. Se puede interrumpir, en consecuencia, los mecanismos de defensa, los radares. Todo.
–No es una guerra convencional.
-Por ejemplo, cuando Irak, se sabe que las potencias tenían todos los celulares de los mandos altos y medios. Y esos oficiales fueron advertidos de las consecuencias de la invasión, si esta llegara a ocurrir. Eso explica por qué la mitad de los oficiales iraquíes desaparecieron en las primeras 48 horas de combate.
-Una operación quirúrgica.
-No necesitan hacer ningún daño ni al país ni a las personas. Por ejemplo, te pueden interrumpir todo el sistema bancario.
-Cuando se habla de intervención se espera otra cosa, que lleguen los marines, las tropas, los aviones, los buques de guerra. Y los riesgos que ello implica. Un polvorín para la región.
-Porque hay un desconocimiento de las realidades contemporáneas de cómo se enfrentan los conflictos. No son los casos de Panamá y Grenada. Aunque la nueva realidad no excluye que frente a las costas se aposten navíos de los Estados Unidos con tropas de asalto.
-Eso es más que un plan disuasivo.
-En un escenario como este puede fraccionarse la Fuerza Armada y pueden aparecer choques internos entre los que resisten y los que se oponen al régimen. De modo que el Estado que promueve la intervención debe tener fuerzas especiales que eviten esos enfrentamientos para que no haya muertos. La fuerza que interviene tiene que estar preparada para eso. Para ese escenario.
-Se supone que el régimen de Nicolás Maduro no está solo. Que rusos y chinos los apoyan.
-¿Los rusos están asesorando con radares, con equipos? Si ese es el caso, ya eso implica una variable más complicada, aunque sería una operación de menor medida que la crisis de los misiles con Cuba. Pero es un aspecto que los Estados Unidos no pueden pasar por alto.
-¿Y los chinos?
-Los chinos no expresan una actividad bélica en el tema venezolano. Hasta ahora. Su problema son los intereses económicos. Que se le reconozcan sus intereses económicos. Venezuela se ha convertido en la plataforma de penetración rusa y china en el continente, y una plataforma muy rica. Riqueza que puede blindar cualquier operación hacia el futuro. Son muchos recursos.
“No está para nada excluido. Pero se está en la fase disuasiva. Si la fase disuasiva no tiene éxito se pasará a la siguiente. Pero de la fase disuasiva a la fase de ejecución hay una brecha grande”
-Y está Cuba también como factor y fuerza aliada. Se habla de la presencia de miles de cubanos. De miles de oficiales cubanos.
-22.000.
-Ese número constituye un ejército.
-En efecto, plantea otro escenario. Una intervención puede implicar una acción de algún género con Cuba. Por ello, en Estados Unidos se adelantan más sanciones contra Cuba.
-Al final, ¿será intervención o invasión?
-Toda intervención es humanitaria. Veamos. Cuando fui presidente del Consejo de Seguridad de la ONU me correspondió aprobar la primera operación de ese género para la ONU. Fue en Bosnia. Y no eran sólo camiones de comida y medicinas los que se enviaban. Sino camiones de comida y medicinas amparados por fuerza militar. Y aún así, la ayuda no pasó del 50% porque los serbios la impedían.
-Lo cual dice que la operación es más compleja, cualquiera sea el diseño.
-No puede hacerse nada en Venezuela si no cuentas con los países más afectados, Colombia y en menor medida Brasil.
-Y se corre el riesgo del polvorín regional.
-Siempre se puede salir de las manos. No hay ninguna operación garantizada. Un plan puede colapsar desde el día Uno. Los imprevistos de un país donde hay presencia rusa, china, de las FARC y el ELN, de Cuba, de Hezbollá. Tampoco hay que descartar lo siguiente. ¿Qué pasa si alguna fuerza militar comienza otra operación bélica en Colombia para distraer? Expande el conflicto. Y la manera más fácil de empezar ese conflicto es la frontera. Esto significa que han movido el campo de acción del plan inicial. Y eso debe estar contemplado en el escenario de guerra.