Daniel Gómez (ALN).- Para el académico Fernando Mires la oposición en Venezuela cometió un error: abstenerse de participar en las últimas elecciones presidenciales. La oposición de Bolivia, en cambio, concurrió a esas elecciones y ahora confronta directamente a Evo Morales tras su dudosa victoria. “Es una diferencia cualitativa”.
Fernando Mires, profesor emérito de Política Internacional en la Universidad de Oldenburg, dice en entrevista con el diario ALnavío que “Evo Morales tiene miedo”.
Bolivia suma dos semanas de protestas desde de que Morales se autoproclamó presidente luego de unas elecciones que brillaron por su falta de transparencia. La consecuencia es que buena parte de la comunidad internacional, la Organización de Estados Americanos (OEA), la Unión Europea, Estados Unidos y Canadá, desconocen el resultado y llaman a una segunda vuelta o a una repetición de los comicios. La OEA propuso un recuento vinculante, y finalmente parece que Morales accede a él.
“Que Evo Morales haya accedido a una auditoría internacional significa que tiene miedo. Si es que al final gobierna, gobernará con mucha deslegitimación, porque el resultado de las elecciones fue dudoso. Muy dudoso”, explica el académico.
La situación recuerda a la de Venezuela ya que las principales democracias desconocen el segundo mandato de Nicolás Maduro, que surge de las fraudulentas elecciones de mayo de 2018.
Sin embargo, Fernando Mires considera que la oposición en Bolivia “tiene una ventaja cualitativa” frente a la oposición en Venezuela.
“Hay una diferencia grande entre la oposición boliviana y la venezolana. Esta última se decidió por el falso camino del abstencionismo y ahora no saben qué hacer con la Asamblea Nacional, aunque también es verdad que les tocó vivir una experiencia distinta. Pero la diferencia cualitativa está ahí”, explica el profesor.
“Hay una diferencia grande entre la oposición boliviana y la venezolana. Esta última se decidió por el falso camino del abstencionismo y ahora no saben qué hacer con la Asamblea Nacional, aunque también es verdad que les tocó vivir una experiencia distinta. Pero la diferencia cualitativa está ahí”, explica el profesor.
Para Fernando Mires fue un error que la oposición de Venezuela se abstuviera de participar en las elecciones presidenciales de mayo de 2018, aunque estuvieran amañadas a favor de Maduro. Eso les limita, dice, “participar desde dentro y exigir unas elecciones libres” como está haciendo la boliviana, que, además, cuenta con un líder visible que surge de las urnas como es Carlos Mesa.
Cabe recordar que la última vez que la oposición en Venezuela concurrió unida a las elecciones arrasó. Le ganó al chavismo en los comicios parlamentarios de 2015. La Mesa de la Unidad Democrática consiguió 117 escaños, mientras que el chavismo apenas logró 55.
Hoy Carlos Mesa es quien dirige las protestas de la oposición en Bolivia. La gente responde a su llamado que aclara, es pacífico y condena cualquier tipo de violencia. En lo político, Mesa celebra la auditoría de la OEA, pero también exige a Evo Morales que se desproclame presidente. Que su mandato termina el 22 de enero de 2020.