María Rodríguez (ALN).- La ministra de Economía y Empresa de España, Nadia Calviño, tiene clara cuál es la ruta para que la economía del país “siga sólida”: combinar estabilidad presupuestaria con agenda social, ajustes estructurales del gasto y aumento de impuestos. Todo ello pasa por lo primero en el orden de prioridades: aprobar los presupuestos de 2019. Calviño asegura que las negociaciones para ello avanzan.
Nadia Calviño, ministra de Economía y Empresa de España, tiene claro cuáles son las líneas de acción para sostener el crecimiento del país, o al menos así lo manifiesta en sus últimas y numerosas declaraciones. Para la ministra, la economía del país “sigue sólida” porque España continúa “en la fase expansiva del ciclo económico, aunque en un momento de menor expansión”, tal como insistió este jueves en Madrid, en una conferencia sobre crecimiento e inclusión social organizada por Funcas -Fundación de Cajas de Ahorros (Leer más: El Gobierno de España asegura que la economía “sigue sólida”).
Avanzar en la aprobación de los presupuestos
Lo primero en el orden de prioridades es aprobar los presupuestos de 2019. En este sentido, Calviño se muestra optimista porque “el Gobierno tiene una buena propuesta, buena base y serán unos buenos Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el año próximo”, subrayó en una entrevista este jueves en Radio Nacional de España (RNE). Asimismo, confirmó que la negociación presupuestaria (especialmente con Podemos) avanza.
Calviño: “El Gobierno tiene una buena propuesta, buena base y serán unos buenos PGE para el año próximo”
Combinar estabilidad presupuestaria con agenda social
La titular de Economía destacó en esta emisora que los presupuestos combinarán la estabilidad presupuestaria con una “ambiciosa agenda social”. También lo dijo horas después en el acto de Funcas. “No cambia la ambición del Gobierno de reducir el déficit público, llevar a cabo medidas estructurales y sociales compatibles con el crecimiento económico”, resaltó.
En un artículo publicado en Expansión, Calviño subrayó que el Gobierno propondrá para 2019 un objetivo de déficit de 1,8% del Producto Interior Bruto (PIB), con un ajuste estructural de 0,4 puntos porcentuales. “Así, España asume por primera vez en cinco años la exigencia de reducir los desequilibrios fiscales sin confiarlo todo a la evolución cíclica”, precisó.
Respecto a la reducción de la desigualdad, la titular de Economía subrayó en dicho artículo la apuesta del Gobierno por cerrar la brecha de género, aumentar la tasa de ocupación femenina y aprovechar este potencial de crecimiento. “Eliminarla [la brecha de género] permitiría que el PIB per cápita aumentara en España hasta 17%”, resaltó.
Ajustes estructurales del gasto
La ministra insistió en RNE en que hay que hacer ajustes estructurales del gasto y sentar las bases para una economía sana cuando cambien los vientos que impulsan el crecimiento.
Y es que estos “vientos de cola, como la inversión y el consumo, también se van agotando”, subrayó en Funcas, donde afirmó que también afecta al ciclo económico español la desaceleración de los mercados internacionales y ciertas tendencias de proteccionismo comercial. No obstante, precisó que esto “tampoco tiene que ser magnificado”.
Subida de impuestos para las rentas más altas
En cuanto a la subida del IRPF (Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas) para las rentas más altas, Calviño aclaró en RNE que no se aumentarán los impuestos a las clases más desfavorecidas ni a la clase media, pero apuntó que aún no se puede determinar el umbral de tipos.
Calviño: “Los vientos de cola, como la inversión y el consumo, también se van agotando”
Impuestos a las transacciones financieras
También en RNE, Calviño defendió que el impuesto sobre las transacciones financieras debe ser una iniciativa global que España está impulsando en la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) y la UE (Unión Europea). Añadió que se podría implantar este impuesto al igual que lo han hecho países como Francia. Añadió que, en concreto en Francia, la experiencia ha sido positiva, sin registrar fugas de empresas.
¿Impuesto al diésel?
Igualmente sobre impuestos, Calviño destacó en RNE que el objetivo del Gobierno es una economía más limpia y que hay que desincentivar el uso de las opciones más contaminantes. No obstante, aún no está decidido si estas medidas para equiparar el precio del diésel al de la gasolina (más cara) se incluirán en el anteproyecto de la ley de presupuestos o no.
En el artículo de Expansión, Calviño subrayó que los desequilibrios de la economía española “no son achacables sólo a la pasada crisis, sino que han sido reforzados por una política económica centrada en recortes del gasto público, bajadas de impuestos y confianza ciega en el poder equilibrador de los mercados”. De ahí que el plan de Calviño para la economía española sea revertir estas tendencias.