(EFE).- El presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, dijo que Corea del Sur está en conversaciones con Estados Unidos para llevar a cabo unos ejercicios conjuntos nucleares en respuesta a las amenazas de Pionyang.
En una entrevista con el periódico local Chosun Ilbo publicada este lunes, Yoon dijo que la idea de que Estados Unidos proporcione un paraguas nuclear o disuasión extendida a Corea del Sur no es suficiente para tranquilizar a los ciudadanos del país.
«Ahora, para una disuasión extendida efectiva, estamos en conversaciones con EE.UU. sobre el concepto de planificación conjunta y ejercicios conjuntos en términos de capacidades nucleares, y EE.UU. se muestra bastante positivo al respecto», afirmó Yoon.
La entrevista se publicó un día después de que los medios estatales de Corea del Norte informaran de que el líder Kim Jong-un pidió «un aumento exponencial» del arsenal nuclear de su país, además de llamar a Corea del Sur «enemigo indudable».
«En el pasado, el concepto de un paraguas nuclear fue una preparación contra la Unión Soviética y China antes de que Corea del Norte desarrollara armas nucleares. Lo que llamamos disuasión extendida también fue que Estados Unidos nos dijo que no nos preocupáramos porque se encargaría de todo, pero ahora, es difícil convencer solo con eso”, añadió Yoon en dicha entrevista.
El presidente surcoreano aclaró que las armas nucleares seguirían perteneciendo a la primera economía mundial, pero la planificación sería conjunta, además de compartir la información y llevar a cabo los ejercicios juntos.
«EE.UU. se siente incómodo con la frase de compartir armas nucleares. En cambio, si desarrollamos esto como un concepto en el que Corea del Sur y EE.UU. lleven a cabo conjuntamente no solo la planificación para la operación de las fuerzas nucleares, sino también ejercicios, entrenamiento y operaciones, esta medida será efectiva», añadió.
Las declaraciones de Yoon llegan tras un año en el que Corea del Norte ha realizado un número récord de ensayos, en torno al medio centenar, de armas de destrucción masiva y en el que la tensión en la península coreana se ha alcanzado nuevos máximos.