Redacción (ALN).- El frío puede provocar dolor de las articulaciones, desde leve, moderado o intenso, e incluso puede aparecer mientras se está en reposo o después de usarse la articulación durante alguna actividad física.
Esta molestia puede tener varias causas, por lo que sí es una constante conviene buscar ayuda de un profesional de la salud para que le oriente acerca de los estudios a realizarse y cómo proceder y tratarlo.
Mientras se concreta la cita médica se recomienda utilizar compresas, las cuales ayudan a desinflamar y aliviar el dolor.
¿Cómo tratar el dolor de las articulaciones con frío?
Aunque el frío puede ser una de las causas de este dolor, algunos expertos en medicina y traumatología recomiendan hacer uso de éste. Por ejemplo, aplicar compresas de hielo sobre los músculos o articulaciones adoloridas luego de hacer ejercicio extenuante.
Según el Dr. Brooks del Hospital Houston Methodist, el hielo es mucho más que un analgésico. Este especialista señala que el hielo es muy útil si el dolor muscular o articular está asociado con la hinchazón que acompaña a una lesión por el uso excesivo o la artritis relacionada con el ejercicio.
¿Y el calor?
Expertos también recomiendan recurrir al calor porque éste hace que los vasos sanguíneos se expandan, aumenta el flujo de sangre y ayuda a aliviar el dolor.
Síguenos en nuestro canal de Telegram aquí
Es decir, al igual que el hielo, el calor debe aplicarse por un tiempo limitado para evitar complicaciones.
¿Qué es mejor?
Tanto el frío como el calor ayudan a aliviar el dolor de las articulaciones, siempre y cuando se apliquen de la manera correcta. Por ejemplo, si el dolor se produce después del ejercicio, los expertos recomiendan usar calor antes para reducir la rigidez de las articulaciones y mejorar la flexibilidad; y después de la actividad, usar hielo para reducir la incomodidad o el dolor.
Con información de 2001