Redacción (ALN).- El contralor general de Colombia, Edgardo Maya, asegura que si la empresa española vuelve a tomar el control de su filial Electricaribe, liquidada en 2017, “se corre un riesgo considerable de que no se logre la debida recuperación de los recursos invertidos”.
La posibilidad de que la española Gas Natural Fenosa (GNF) vuelva a tomar el control de su filial Electricaribe plantea riesgos “considerables” para los intereses del Estado colombiano, según advirtió este martes el contralor general de Colombia, Edgardo Maya. Para el funcionario, citado en un comunicado recogido por la agencia EFE, es necesario conocer las acciones que se están empleando para evitar que se hagan efectivas las garantías que ha otorgado la Nación para las compras de energía de Electricaribe y, en caso extremo de que esto ocurra, verificar cómo se va a garantizar la devolución de estos recursos. Recordó que las garantías otorgadas por la Nación ascienden a 135.000 millones de pesos (unos 47,4 millones de dólares) y que adicionalmente con un crédito de 320.000 millones de pesos (unos 112,5 millones de dólares) para el mismo fin, que sería utilizado a medida que la operación de la empresa lo requiera. “Los valores comprometidos no tienen antecedentes en ningún proceso de intervención y dado que la empresa no tiene indicadores financieros que aseguren que el dinero sea revertido, se corre un riesgo considerable de que no se logre la debida recuperación de los recursos invertidos”, manifestó Maya. Por otro lado, el ente de control llamó la atención para que el pasivo pensional a cargo de la empresa, alrededor de un billón de pesos (352 millones de dólares) no vaya a quedar nuevamente bajo la responsabilidad del Estado. En 2016, Electricaribe fue intervenida por problemas financieros y en marzo de 2017, el Gobierno ordenó su liquidación y la búsqueda de un operador para asumir la prestación del servicio. A esas medias, GNF respondió con un procedimiento arbitral para reclamar a Colombia más de 1.000 millones de dólares por lo que considera una expropiación.